Miguel Esteban recobra su «vida social»

L.T.
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La localidad celebró su tradicional Fiesta de la Vendimia con la que pretende "mantener las tradiciones que lleva aparejadas la vendimia y extender la cultura del vino entre la población"

Los más pequeños también disfrutaron de la Fiesta de la Vendimia.

La Fiesta de la Vendimia celebrada del 16 al 17 de octubre en Miguel Esteban, sirvió para que personas de todas las edades disfrutaron de las actividades organizadas por el Ayuntamiento miguelete con el fin de ensalzar el trabajo de agricultores y viticultores, mantener las tradiciones que lleva aparejadas la vendimia y extender la cultura del vino entre la población.

La primera cita de esta Fiesta de la Vendimia fue la Galería del Vino, organizada por el Consejo Regulador de la D.O. La Mancha y desarrollada en la Casa del Tío Félix. Unas 70 personas participaron en esta actividad degustando vinos de diferentes tipos acompañándolos de productos gastronómicos tradicionales como queso, jamón, chorizo, empanada o tortilla de patata.

El sábado, la actividad se trasladó al paraje de San Isidro para festejar el Día del Caldillo. Unas 400 personas, distribuidas en unas 35 cuadrillas se dieron cita en este lugar para disfrutar de una jornada gastronómica y lúdica con sabor a vendimia.

Algunas cuadrillas comenzaron la jornada almorzando en la pradera e incluso permanecieron allí hasta el anochecer. Todos los participantes elaboraron sus típicos «caldillos» empleando productos tan variados como palomo, pollo o bacalao.

Por último, el domingo 17 de octubre, unos 50 niños y niñas participaron en la tractorada infantil. Subidos en sus tractores de juguetes a pedales, e incluso algunos ataviados con blusa y boina.

La concejal de Festejos, Turismo y Tradiciones, Mari Nieves Patiño, realizó un balance muy positivo de esta Fiesta de la Vendimia destacando el buen ambiente que se ha creado en cada una de las actividades y el buen tiempo que ha acompañado estos días, retomando las tradiciones, reuniones y reencuentros y recobrando la vida social que la pandemia nos había arrebatado hasta ahora.