Cuando hacemos el análisis de los festejos taurinos, una vez acabada la temporada, se suelen ver el número y tipo de festejo que se celebran. Los festejos populares tomas la cabeza en la provincia toledana, desbancando al festejo de profesionales, llegando a las 300 las autorizaciones administrativas tramitadas por el diligente servicio que se encarga de ello, pese a que hay veces que se tienen que resolver más de 20 expedientes para un solo día.
La conclusión que se saca de analizar estos datos, es que lo que más se organiza por ayuntamientos y empresarios son festejos populares. Son encierros urbanos, por el campo, sueltas de reses, concursos y festejos de tradición singular, que suponen el 71% de los 422 celebrados. De los 99 municipios que llevaron a cabo eventos taurinos, 87 tuvieron algún tipo de festejo popular, lo que denota su clara implantación. El crecimiento es notable y desde 2017, han crecido un 8,3% en su cantidad, por la gran aceptación que tienen por los aficionados.
Se tratan los festejos populares de eventos en su mayoría gratuitos y que compaginan la plaza de toros, las calles y el campo. En ellos se vive la verdadera pasión del pueblo, que hace que sientan y vivan la emoción y el riesgo de manera muy cercana. Participan aficionados, los hay más avezados, los asiduos y aquellos que quieren sentir por un día la adrenalina de unos segundos que les da el placer que les hace volver una y otra vez a sentirlo. La asistencia suele ser masiva, y los jóvenes son los más receptivos a estos festejos donde la diversión está asegurada, la res no sufre ningún castigo en público y el sacrificio se hace fuera de la vista de los espectadores, una vez acabado el serial.
Dentro de los festejos populares que en Castilla-La Mancha están regulados por un reglamento propio, están los encierros urbanos que se suelen celebrar en municipios con gran arraigo de trasladar las reses del festejo de la tarde, por las calles de la localidad, para el deleite y disfrute de los asistentes. Estos encierros llegaron a contabilizarse hasta en 67 en 33 localidades, siendo Casarrubios del Monte el que más celebra con 5. Pero no se celebran más porque en muchos pueblos se cambió la denominación del festejo como suelta de reses, lo que les permite ampliar su duración de 15 minutos en los encierros, hasta las tres horas en las sueltas. Por ello es normal que la suelta de reses encabece el ranking con 185 autorizaciones en 77 localidades distintas. La suelta de res acoge de manera amplia, los festejos que se sueltan machos, hembras, en puntas, despuntados, en la plaza, recinto urbano o vías públicas. Por ello es normal ver pueblos como Villaseca de la Sagra en que las carreras de los novillos utreros que se lidiarán por las tardes, es solicitado a la Junta como suelta de reses y todo el mundo reconoce como encierro. Las sueltas también suelen completar otro tipo de festejos como encierros o tras festejos mayores con profesionales.
La denominación suelta con concurso se ha usado en 35 autorizaciones, y esto engloba de la misma manera un concurso de recortes con toros, novillos o vacas, hasta un popularmente conocido como ‘Gran Prix’, requiriendo en todos ellos de un reglamento, jurado y premios para los vencedores.
La comunidad manchega incluyo en su normativa la variedad de Festejo tradicional singular, donde localidades que cumplan criterios históricos y característicos demostrables, desarrollan ordenanzas propias y basándose en el reglamento de espectáculos populares, incluyen mejoras o características de la tradición local. Han sido Casarrubios del Monte, Villaluenga de la Sagra y Yuncos los que han celebrado festejos en esta modalidad, llegando a 11 el total de ellos.
Los encierros por el campo son los de menor número, dos únicamente los celebrados en Casarrubios del Monte y Cedillo del Condado, pero son varias más las localidades que lo tienen regulado como el caso de Lominchar que fue durante varios años el evento por el campo estrella de la provincia toledana. Aunque es posible que más pronto que tarde municipios como Villaseca de la Sagra o Añover de Tajo sorprendan con encierros camperos, pues tienen sus ordenanzas para ello y con todos los requisitos en orden. Sería una noticia reseñable que se llevasen a cabo y lógicamente atraerían mucho público y aficionados.
Un aspecto positivo de los festejos populares, es la facilidad que da la Junta de Comunidades para tramitar este tipo de festejos, a través de la plataforma CESAR, que en pocos minutos, con los conocimientos oportunos, puedes solicitar y completar un expediente completo para su autorización. Todo un logro que ha hecho que proliferen estos festejos, que esperamos sean el germen de conexión para que celebren seguidamente festejos mayores y sean escuelas de aficionados a la tauromaquia.