El trabajo y tesón de Villaseca de la Sagra, su entrega y vinculación con los festejos taurinos, hace que este pequeño municipio sagreño continúe un año más a la cabeza en cuanto a número de los celebrados. Vuelven a ser 17, los eventos solicitados por este Ayuntamiento a la delegación provincial de la Junta de Comunidades en Toledo. De ellos 8 han sido sueltas de reses, 5 novilladas con picadores, 2 concursos de recortes, un festival picado y una novillada sin picadores. Una programación que ha ido este año desde junio hasta octubre, destacando por encima de todo, la feria del Alfarero de Oro, que cumplió 20 ediciones consecutivas. Un ciclo que se ha consolidado en cuanto a repercusión, presentación del ganador, confección de los carteles y asistencia de público. En el aspecto del público hay que resaltar los dos festejos que colgaron en sus taquillas el cartel de “No hay billetes”, cubriendo la totalidad de su aforo. Esto ocurrió en el concurso de recortes con los toros pamplonicas de Cebada Gago y en la novillada picada que cerraba el ciclo con las reses de Monteviejo, propiedad de Victorino Martín.

Le siguen en cuanto a número de festejos La Puebla de Montalbán y Yuncos, ambas localidades con 14 festejos. La nota predominante en los dos pueblos es que sólo celebraron festejos populares, pese a su gran afición, no han visto toreros a pie o a caballo en sus plazas de toros, algo que podría complementar la extensa actividad popular. En La Puebla de Montalbán, siguen fieles a sus festejos y a sus fechas, incluyendo este 2019 una suelta de reses en el mes de enero. Pero el grueso se celebró entre los días 15 y 22 de julio, donde las calles se llenan de vacas, mientras en la plaza portátil se celebra uno de los concursos de recortes más destacados e importantes de la provincia. Yuncos este año aumento ostensiblemente los eventos, a ser la sede de Congreso Nacional de Toro de Cuerda. Para ello el mes de junio acogió a más de 50.000 personas durante cuatro días, con 15 delegaciones venidas de toda España. El toro de San Blas sigue siendo su mayor escaparate y da el pistoletazo oficial de los festejos de la Sagra. Al final han sido 4 festejos tradicionales singulares, 7 sueltas de reses, 2 encierros por las calles y un concurso de recortes.

Con doce festejos celebrados han estado Casarrubios del Monte, Illescas y Portillo, pueblos que han combinado los populares con los eventos con profesionales. Casarrubios del Monte ha sido el municipio con más encierros por vías urbanas de la provincia, cinco, y uno por el campo, a lo que hay que sumar un festejo tradicional popular, una suelta con concurso, una novillada picada, dos sin picadores y una becerrada. La tradición taurina muy arraigada les hace compensar el toreo con el animal bravo en las calles. En Illescas han destacado sus dos corridas de toros y en especial la celebrada en la Feria del Milagro con la presencia en el mismo cartel de Morante de la Puebla y Roca Rey, lo que hizo que se acabasen las entradas para ese día, y hasta se contase con la presencia del Rey Emérito, Don Juan Carlos. La otra corrida fue la celebrada en septiembre, de gran éxito artístico, pero no tanto de asistencia de público. La feria de marzo se completó con una corrida de rejones con los tres actuantes a hombros. Pero además se han celebrado 2 encierros urbanos, 6 sueltas de reses y un concurso de recortes matinal. En Portillo, villa se gran arraigo taurino, continúan los festejos como eventos principales de las fiestas de septiembre. Tres encierros, 5 sueltas de reses, un concurso y tres novilladas sin picadores ha sido el plantel para los aficionados.

Villaseca de la tauromaquiaVillarrubia de Santiago solicitó a la delegación de la Junta once expedientes de los que 4 eran encierros urbanos, 4 sueltas de reses, una novillada picada, una sin picadores y una novillada de rejones. 

Almorox, Santa Cruz del Retamar, Seseña y Valmojado han tenido 9 festejos en cada municipio. Destacan las dos corridas de toros en Almorox y las dos novilladas picadas en Santa Cruz del Retamar, ambos pueblos con grandes aficiones y con el gusto por los toros con volumen y trapío. Entre todos estos municipios el rasgo común es que realizaron tres encierros por sus calles en cada uno.

Al final de la temporada han sido 99 las localidades de la provincia que han celebrado festejos taurinos. El número es similar a otros años, oscilando esta cantidad, por las vicisitudes particulares de cada sitio. Buenaventura, Lagartera, Magán, Montesclaros, San Pablo de los Montes y Villanueva de Bogas, se han unido a los nuevos organizadores en este año, algunos por un lapsus corto de tiempo y otros porque han vuelto a recuperar tras muchos años los festejos taurinos en su municipio como el caso de San Pablo de los Montes.

Esta situación se da cada año, pues Los Cerralbos, Pulgar, Torrico, Polán, Nuño Gómez, Garciotum. La Iglesuela y Chozas de Canales, sí que celebraron el año 2018 toros y este año no lo han hecho. Aunque los datos históricos hacen prever que volverán más pronto que tarde.

Toledo es de las provincias con una asentada tradición taurina en sus pueblos que forman parte de las tradiciones heredadas del pasado, que se conserva con mimo. Las nuevas generaciones apoyan en los municipios estos festejos que tienen gran aceptación como el ejemplo de Sotillo de las Palomas, que ha celebrado cuatro festejos populares con escasos 200 habitantes censados.