El comercio sigue a la deriva 1 año después de su reapertura

Lola Morán Fdez.
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Desde Comercyas señalaron que el sector está «muy tocado» por las medidas restrictivas y no prevén que mejore la situación, aunque Servicios no se ha visto tan afectado en actividades como las obras

El comercio sigue a la deriva 1 año después de su reapertura - Foto: Manu Reino

Este mes de mayo se cumple un año de la reapertura de negocios al público tras la declaración del estado de alarma por la pandemia del coronavirus. Una circunstancia que, un año después, todavía tiene sus efectos en la economía local, entre otras cuestiones por mantenerse determinadas restricciones y por los meses que han permanecido sin actividad y, por consiguiente, sin ingresos.

Como explicó a La Tribuna el tesorero de Comercyas, Héctor Valdivielso, el comercio local está «muy tocado», en buena parte debido al cierre perimetral, ya que si bien los vecinos de la comarca pueden acercarse a la ciudad, no es el caso de otros municipios limítrofes pertenecientes a las comunidades vecinas de Extremadura y Castilla y León. «El cierre perimetral nos ha hecho bastante daño», recalcó Valdivielso, quien confirmó que, a lo largo de este tiempo de pandemia ha habido «bastantes» comercios que han tenido que echar el cierre.

Esta medida ha afectado tanto a locales de hostelería como peluquerías y comercios, y a ella se añade el intento de traspaso de muchos negocios porque sus propietarios no pueden asumirlos.

Para Valdivielso, no obstante, «todavía no hemos empezado», puesto que ahora es el momento de afrontar los préstamos ICO solicitados meses atrás. «No nos hemos recuperado pero dentro de poquito va a haber que empezar a pagarlos», señaló, para recalcar que, «si la cosa no mejora mucho, se va a agravar bastante la situación». «Ya no es solo que no tengamos ingresos, es que además nos aumentan los gastos», manifestó este comerciante.

Echando la vista atrás, recordó cómo se vivió la reapertura de negocios hace un año tras la declaración del estado de alarma que obligó al cierre de la mayoría de sectores. Entonces, en el proceso de desescalada, en mayo de 2020 pudieron reabrir los comercios con la esperanza de que la pandemia cesara y regresara la actividad. «Pero pasa el tiempo y esto no se pasa, y hace ya un año y seguimos en las mismas», reconoció este comerciante, recordando además las inversiones que tuvieron que realizarse para adaptar sus negocios a la situación sanitaria.

Tuvieron además que «reinventarse», mientras que se exigía justificar un 70% de pérdidas para acceder a las ayudas, como lamentó Valdivielso, señalando que si la mayoría hubiese tenido esos datos, habría «cerrado» porque «con ayudas o sin ayudas, es totalmente imposible».

Valdivielso manifestó que, en estos momentos, el ambiente del sector es de «pesimismo total», como también «entre la clientela». «Creo que el dar cerrojazo se nos ha pasado por la cabeza a todos», reconoció este comerciante.

Para Valdivielso, desde el comercio «se está luchando mucho, la esperanza no se pierde, pero hay mucha gente que se ha quedado atrás y que no va a poder continuar porque esto ha sido una gestión política pésima, tanto el tema del virus como de las ayudas». «Cada vez nos están comiendo más los grandes y, ante eso, no vamos a poder hacer nada», lamentó, haciendo referencia al incremento de ventas de las grandes plataformas durante el confinamiento mientras el comercio tradicional no pudo abrir.

Sector Servicios. Por su parte, la presidenta de Comercyas, Susana Pedraza, señaló que en el área de servicios no han estado tan afectados como el comercio y comentó, que en cierta manera, ha habido «un pequeño auge» en algunos negocios. Entre ellos, apuntó a los vinculados a la rama de la construcción o decoración, señalando que ha notado «cómo ese dinero que se invertía en viajes, ocio, restaurantes, se ha invertido en casa».

«Hemos estado mucho tiempo metidos en casa y mucha gente le ha dado una vuelta» a sus viviendas, con pequeñas obras, cambios de decoración o restauración de muebles, entre otros.

Por ello, dijo que no hay que ser «tan pesimistas» y si bien el sector «no ha ganado muchísimo, al menos no ha perdido».

Para Pedraza, puede que ahora, si se levantan los cierres perimetrales, pueda reducirse la actividad hasta ahora tan demandada para reformas en las viviendas.

En cualquier caso, ese auge, como recordó, se produjo a partir del pasado otoño, ya que al inicio de la pandemia «la gente tenía miedo de que alguien entrara a su casa» por un posible contagio de coronavirus.

En estos momentos, la presidenta de Comercyas apeló a la unidad, animando a sumarse a la entidad porque «la unión  hace la fuerza».