La localidad toledana de Yepes está viviendo una noche agitada. Multitud de vecinos se han echado a la calle para movilizarse contra los ocupantes en régimen de realizó de unos edificios en la calle Picota y en la calle Cimballa. Hace meses que la convivencia es difícil, pero el detonante de esta movilización fue, en la misma tarde de ayer, la quema de la puerta de una vivienda habitada por personas mayores.

Por redes sociales y el boca a boca, se animó a la gente a acudir a primera hora de la noche para instar a estos ocupantes a marcharse. Antes de que el tumulto se agolpara en torno a sus edificios, los increpados salieron en un coche hacia otro lugar del municipio, donde al parecer se atrincheraron con armas y amenazaron a los vecinos con improperios de todo tipo.

Evidentemente, la situación requirió de la presencia de las fuerzas de seguridad. Por eso, fueron llegando con cuentagotas agentes de la Guardia Civil, de la Policía Local y Nacional y los Antidisturbios para hacerse con el control de la zona. La tensión fue creciendo hasta la medianoche por el miedo a lo que pudiera pasar. Hay que decir que los ocupantes que residen en estos edificios se encuentran régimen de realojo.

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Semanas atrás se creó una Plataforma Vecinal por la Convivencia Cívica de Yepes con el objetivo de regular la situación, ya que, tras varias reuniones, los dirigentes municipales les instaron a seguir los cauces legales, que llevan sus tiempos. Al recibir amenazas de algunos vecinos, los ocupantes quemaron la puerta de una casa, en la misma calle la Picota, algo que ya habían intentado días antes. Afortunadamente, las personas consiguieron salir a tiempo y sin daño alguno. Desde la plataforma reconocen que “ya no estamos hablando de vandalismo o robos en viviendas, estamos hablando de auténticos atentados contra la integridad y la vida de las personas”.