Toledo registra 3,5 demandas de divorcio diarias

M. G.
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Los divorcios no se desplomaron en la provincia en 2020 a pesar de la pandemia a pesar de que en el ámbito nacional cayeron un 13,3. La provincia registró 1.297 demandas, 37 más que en 2019

Toledo registra 3,5 demandas de divorcio diarias - Foto: Yolanda Lancha

Con los números nunca se sabe aunque parezca todo contado. Las previsiones ayudan, pero no siempre se cumplen y en el caso de las disoluciones matrimoniales que llegan a los juzgados, Toledo se ha salido de la línea que ha seguido el ámbito nacional en el atípico 2020.

 Según el boletín trimestral del Consejo General del Poder Judicial, se produjo un descenso significativo -del 13,3%- en todos los tipos de demandas relativas a las rupturas matrimoniales y en divorcios, la fórmula a la que más se recurre, la caída fue del 11,4% en los consensuados y del 15,7% en divorcios contenciosos. Sin embargo, la provincia de Toledo ha seguido la misma tónica del año anterior, las cifras son muy similares y el aumento de las demandas de divorcio es simbólico, ya que se traduce en un 2,9% porque los juzgados ingresaron 36 demandas más en 2020.

Si se atiende a los datos por encima se podría decir que los órganos judiciales de la provincia reciben unas 3,5 demandas de divorcio de media a diario, aunque no sucede así a rajatabla porque el cálculo se realiza contando con sábados y domingos, pero ayudan a evaluar la actividad a lo largo de un año completo.

La estadística refleja que 2020 no fue tan complejo para estos asuntos como se esperaba a pesar del estado de alarma y el confinamiento domiciliario de dos meses que obligó a aparcar la actividad judicial en esos momentos salvo los casos urgentes. Aun así, se iniciaron 1.792 demandas de divorcio en la provincia de Toledo, la mayor parte recayó en los juzgados de Primera Instancia e Instrucción, puesto que se interpone de mutuo acuerdo, pero también se formalizaron 575 demandas, casi todas a través del Contencioso-Administrativo porque alguna de las partes no presta su consentimiento, pero es posible que algunas se tramitaran a través del Juzgado de Violencia sobre la Mujer, que recae en el de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Toledo capital, aunque no se facilita información al respecto.

Al margen del cómputo anual, lo que sí añaden las cifras es que el segundo trimestre de 2020, que coincidió con el aislamiento por el coronavirus sí trastocó las cifras habituales en estos meses, ya que únicamente hubo 104 demandas de divorcios consensuados y 89 no consensuados cuando el resto de trimestres mantienen muchas más, sobre todo, el cuarto, relativo a octubre, noviembre y diciembre, que contabilizó 406 demandas de divorcio.

Los expertos llevan años analizando la incidencia de divorcios y separaciones de los últimos años. Las causas son múltiples y diversas, pero lo cierto es que el Instituto Internacional de Estudios sobre la Familia aseguraba ya hace cinco años que cuatro de cada diez divorcios se podrían evitar con periodos de reflexión o soluciones para afrontar las crisis de pareja.

La estadística del Consejo General no permite ahondar en factores, aunque sí señala que la mayor parte de los matrimonios que quieren divorciarse o separarse llevan juntos más de diez años. En este caso, el 73,9% de las 1.260 demandas de divorcio interpuestas en 2019, demuestran este hecho.

En relación a los partidos judiciales toledanos, Illescas es el que registra mayor número de demandas de divorcio. Cerró el año con 365, incluidas las que no son de mutuo acuerdo, 87 más que las que asumieron los juzgados de Toledo capital. No es la primera vez que ocurre porque algunos partidos judiciales como el de Illescas soportan una gran carga de trabajo desde hace años.   

preferencia. Los divorcios siguen ganando terreno en relación a las separaciones. A pesar de que se trata de una fórmula más, la estadística confirma que no tiene mucha aceptación aunque cese la convivencia porque no rompe el vínculo matrimonial, una tendencia que se repite también en el resto del país. Las cifras lo ponen en evidencia, ya que únicamente se formalizaron 53 separaciones, de las cuales 17 no fueron consensuadas.

Los datos también añaden la petición de nulidad matrimonial, una fórmula excepcional que debe cumplir unos requisitos muy específicos difíciles de cumplir. En Toledo no se formalizó ninguna el año pasado.

 

Más datos. El CGPJ también contempla que los juzgados toledanos iniciaron la modificación de medidas en 554 casos a lo largo del año pasado. En este caso concreto, en 150 procedimientos fueron consensuadas, una cifra baja en relación a los cambios en medidas no consensuadas, en un total de 404 demandas.