Guinda a una semana espectacular

La Tribuna
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El Soliss Talavera derrota el Software Delsol Mengíbar con una gran imagen en la primera parte (3-0)

Guinda a una semana espectacular

Salió vivo el Soliss Fútbol Sala Talavera de una dura semana con hasta tres partidos y además lo hizo por la puerta grande. Y es que si el pasado sábado se vencía al Barça B y el martes se superaba la ronda de Copa del Rey al Aspil Jumpers Ribera Navarra, en esta ocasión el que caía doblegado ante el conjunto de Talavera de la Reina fue Software Delsol Mengíbar.

El conjunto de Rubén Barrios minimizó las virtudes del conjunto jienense, que son muchas, y lo hizo a base de una perfecta defensa, pero sin renunciar al ataque. Partido tremendamente completo que encima se vio refrendado con la portería a cero.

Y la verdad es que todo empezó rodado y además muy prontito, porque a los 20 segundos ya tomaban la delantera en el marcador los de la Ciudad de la Cerámica en acción de tiralíneas. Sacaba de banda Pepe, enviaba Asensio al corazón del área y Manu Cebrián que metía la zapatilla para desviar lo justo y cambiar la dirección al remate ante la salida de Jesús Gómez.

Guinda a una semana espectacularGuinda a una semana espectacularQuería más el conjunto talaverano, que aprovechaba la cresta de la ola para intentar tomar más distancia, algo que pudo lograr un minuto más tarde tras servicio de Pepe a Asensio y remate de este último cuando el meta ya estaba superado. Y seguía acumulando Talavera, que la tendría en dos faltas en la frontal estrelladas en la barrera tanto por Kike como por David Rondón.

Y la tónica no iba a cambiar, ya fuera en estrategia, en posicional o a la contra, pues Anass la tenía en el mano a mano frente a Jesús Gómez y el arquero le ganaba la partida, a Manu Cebrián le faltaban centímetros para llegar al pase de Víctor López y también centímetros a Pepe con un remate en el que el meta respondía con una soberbia parada para mantener con vida a su equipo.

El conjunto mengibareño sí que es cierto que tuvo momentos en los que llevaría el peso y que incluso podría igualar, pero también es cierto que aparecía Rafa Luque para salvar a su equipo como la parada que protagonizaba ante Álvaro Vera al segundo palo, casi a bocajarro, o el toque preciso para desviar junto al poste el disparo de Aitor con el que salvaba a los suyos del 1-1.

Corregidos esos desajustes defensivos que dieron algún que otro susto, el equipo seguía mirando hacia adelante y además con cabeza. Rebasábamos el ecuador de la primera mitad y casi sin quererlo llegaba el 2-0. En una acción por banda derecha Kike enviaba al corazón del área y en su intento por despejar José López se metía la bola en su propia portería.

Este tanto hizo realmente daño a los de Francisco Javier Garrido, que a renglón seguido pudieron encajar el tercero en claras opciones marradas tanto por Kike como por Pepe. Al técnico visitante, que veía que no le salían las cosas a su equipo, optó desde el minuto 14 por el juego de cinco, aunque la verdad es que de poco le servía, pues el conjunto visitante encajaría un minutos más tarde el 3-0 con un remate a puerta vacía de Sergio.

Iniciaba el segundo acto y el Soliss FS Talavera que intensificaba el control del encuentro ante un rival que conforme pasaban los minutos más iba desesperándose. Quizá todo pudo haber cambiado si los postes no hubieran repelido los remates tantos de Colacha como de Ureña, pero es que antes de esos tanto Pepe como Kike, Asensio y David Rondón ya habían tenido las suyas.

Y viendo que a los jienenses no le salían las cosas, nuevamente su técnico optó por el juego de cinco y ya lo mantuvo durante 12 minutos. Pero fue una estrategia estéril. No encontraban hueco los andaluces de ninguna de las maneras, abusando de los bloques, coqueteando con la sexta falta y en más de una ocasión les tocó correr para atrás.

Y es que desde su área lo buscó hasta Rafa Luque, como también antes lo había hecho y hasta por dos veces Víctor López e incluso Asensio. Lo curioso es que el encuentro no acabaría en área local, sino en área visitante, porque el poste le privó a Kike del 4-0, como también a Pepe en el rechazo posterior.