El nuevo hospital de Toledo entrará en funcionamiento antes del próximo mes de junio. Ya no solo se trata de un anunció político. Ahora las cifras entran en juego. Y el dinero duele más que las palabras. El proyecto de Presupuestos de Castilla-La Mancha para 2020 hecho público ayer así lo contempla, al incluir el pago del primer canon del macrocentro sanitario.
En total, la partida cifra en 37.254.900 euros el dinero que saldrá de las arcas públicas para pagar a la constructora, la empresa ‘Nuevo Hospital de Toledo SA’. La cantidad es más de la mitad del canon anual fijado en su día, que quedó marcado en los 60 millones de euros. Exactamente es un 62%, por lo que se demuestra que el Sescam va a abrir las puertas del hospital antes de junio.
Ese canon deberá ser abonado por el Gobierno de Castilla-La Mancha todos los años durante los próximo 28 ejercicios, tal y como quedó fijado en el contrato firmado por ambas partes en marzo de 2017. El precio de 60 millones es aproximado, puesto que la cantidad final de cada año será resultado de un canon fijo, que es el que se destina a amortizar los servicios que se prestarán obligatoriamente y el precio de la obra, y un canon variable, que tiene unas fórmulas y unos coeficientes que pueden variar dependiendo de la actividad y de los servicios.
Con todo, la partida supone un antes y un después en la historia sanitaria de la comunidad, que contará con un nuevo hospital para su capital tras llevar en funcionamiento el Virgen de la Salud desde el 30 de mayo de 1965.
Los 37,2 millones de euros del primer pago del canon del hospital son la cantidad más abultada que recibe Toledo en el proyecto de Presupuestos. Si se suma el resto de inversiones, gastos y contrataciones previstas en sanidad y bienestar social para ciudad, el coste del hospital sigue suponiendo más de la mitad del total. En números, la Junta destinará en 2020 más de 103 millones de euros a la ciudad de Toledo en esas dos áreas y el canon del nuevo hospital se lleva 37,2. El resto del montante, más de 65,8 millones de euros, también repercutirá directamente en él, puesto que las mayores partidas, unos 58,7 millones de euros, implican nuevos contratos a firmar para la Gerencia de Atención Especializada de Toledo, a la que pertenece el Complejo Hospitalario de Toledo constituido por el Hospital Virgen de la Salud, Hospital Virgen del Valle, Hospital Provincial y los Centros de Especialidades, Diagnóstico y Tratamiento de Illescas, Torrijos y Ocaña.
A todos ellos, en breve se les sumará el hospital del Polígono, y es por ello que recibirá gran parte de contratos; como el de limpieza y desinfección, que supera los 29 millones de euros. Planchado y limpieza de ropa (5,2 millones), guantes (2,2 millones), tubos para análisis de sangre y orina (1,4), absorbentes de incontinencias (2,6), el mantenimiento integral de equipos de alta tecnología (3,3 millones) o de equipos electrómedicos (5,5 millones) son otras de las partidas correspondientes a Toledo que repercutirán en la nueva infraestructura sanitaria.
El futuro hospital de Santa María de Benquerencia contará con 835 camas y 25 quirófanos que darán servicio a 435.000 personas que residen en los 116 municipios que forman parte del área sanitaria de Toledo.
El bautizado como Hospital Universitario de Toledo tendrá, entre otros equipamientos de alta tecnología, dos quirófanos híbridos, dos salas de hemodinámica, dos aceleradores lineales, tres resonancias Magnéticas, tres TAC y un PET-TAC.
Su apertura supondrá además un importante impulso en la contratación de profesionales, con un incremento de más de 500 plazas en la plantilla orgánica.