Menos Policía y Guardia Civil en Toledo que hace 10 años

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Los dos cuerpos que actúan en la provincia llegaron a su mínimo en 2017 y, desde entonces, van recuperando personal. La Benemérita cuenta ahora con 1.580 agentes y la Policía Nacional con 442. En 2011 eran 2.057 efectivos

La Policía Nacional actúa en grandes poblaciones y la Guardia Civil en el resto del territorio. - Foto: Yolanda Lancha

Las plantillas de la Policía Nacional y de la Guardia Civil están en Toledo todavía por debajo del nivel que disfrutaron hace diez años. Es (casi) una buena noticia viendo que entre 2011 y 2017, de forma constante, han estado perdiendo efectivos. La crisis y la política tuvieron la culpa aunque desde hace un lustro la tendencia se ha invertido. La Guardia Civil, que da servicio en toda la provincia, tuvo su peor momento en 2016, año en el que su plantilla se redujo hasta 1.447 agentes si bien al cierre de 2021 ha remontado hasta llegar a 1.580. Por su parte la Policía Nacional, que solo cubre grandes poblaciones (Toledo y Talavera), llegó al mínimo en 2017 con 384 agentes y al acabar 2021 su número ha aumentado hasta 442.

Según la información facilitada por el Gobierno central a los diputados del PP por Toledo, entre los años 2012 y 2018 se produjo un descenso de 13.000 efectivos en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el conjunto de España. Desde 2018, con ofertas de empleo que contemplan unas tasas de reposición del 115%, se está invirtiendo la tendencia, lo que está permitiendo mejorar la dotación de las plantillas, priorizándose las unidades para las que existe una mayor demanda. En 2021 la tasa de reposición se ha incrementado al 130%, continuando el incremento del número de efectivos disponibles.

La evolución de efectivos en la Policía Nacional es lineal, con un descenso constante durante siete años (pasa de 467 agentes en 2011 a 384 en 2017) y una recuperación a partir de ese momento también ininterrumpida (hasta los mencionados 442)

Sin embargo la Guardia Civil sufre importantes vaivenes en sus filas teniendo el descenso más acusado precisamente al inicio de esta serie ya que en 2011 tenía 1.590 agentes y un año más tarde había perdido 48. Consiguió recuperar terreno el 2013 (ganando 32 efectivos) pero luego padeció tres años seguidos de descensos (perdió 117) hasta quedarse en los 1.447 efectivos de 2016, momento en el que la tendencia se invierte y en cuatro años suma 130 agentes más para llegar a los actuales 1.580.

Los datos son a 31 de diciembre de cada año excepto 2021 que es a 31 de agosto. Los efectivos disponibles agrupan las situaciones administrativas de activo, segunda actividad con destino/reserva ocupado y alumnos en prácticas.

El conjunto de ambos cuerpos tiene entre otras funciones hacer frente los  robos con fuerza en viviendas que en el caso de la provincia de Toledo, referidos a delitos graves, menos graves y leves,  robos con fuerza en viviendas y otros lugares anexos, en los últimos años han registrado 2.509 denuncias en todo 2019, bajaron a 1.842 delitos en 2020 y esa tendencia se mantiene entre enero y agosto de 2021 cuando se denunciaron 968 casos.

También asumen otras tareas especializadas como el caso de la violencia doméstica para la que cada cuerpo cuenta con unidades específicas. En el caso de la Guardia Civil se trata de la EMUME (Especialistas Mujer-Menor) que hasta 2019 contaba con 14 profesionales pero los dos últimos años han sido reducidos a 12.

Por su parte la Policía Nacional cuenta con la UFAM (Unidades de Atención a la Familia y Mujer) que se desglosa en tareas de protección y de investigación y que en la década ha contado con una media de 17 profesionales (siempre dedicados a investigar en mayor número).