Toledo está viviendo imágenes impactantes con el paso de la DANA por la ciudad.  Una de las más dramáticas  ha ocurrido en la carretera de Ocaña, en las cercanías del barrio del Polígono. Los conductores se han visto sorprendidos por una intensa riada mientras circulaban por el carril en dirección a Ocaña (N-400) ahora bautizada con To-23 y han tenido que abandonar sus vehículos con urgencia.

Algunos de ellos han sufrido ataques de ansiedad por la situación y por dejar abandonados a la deriva sus coches sin poder hacer nada. El carril se ha anegado por completo debido a que la mediana de la carretera ha actuado como muro de contención y varios vehículos han sido arrastrados por el agua. Si bien, las personas se han puesto a salvo de posibles riesgos saltando la mediana para acceder al carril contrario, sentido Toledo.

No ha ocurrido así con un menor que viajaba en uno de los vehículos que se ha visto sorprendido por la avenida de agua y quedó medio sumergido en el lodazal que se formó en la principal vía de acceso al Polígono a esas horas muy transitada ya que las nubes empezaron a descargar con fuerza entre las tres y las cinco de la tarde. Finalmente dos bomberos han rescatado al niño pequeño que permanecía en el interior, en la parte trasera del coche familiar.

La situación obligó a interrumpir el transporte urbano en el Polígono. En Santa Bárbara los autobuses funcionaron salvo en el tramo del paseo De la Rosa cortado por el agua. 

El Ayuntamiento, que recomendó evitar los desplazamientos, ofreció una alternativa para poder llegar del Polígono a Toledo. La opción era salir sentido Ocaña hasta Algodor para después coger la 4006 hasta Mocejón y luego la 4001 o la TO-22 sentido Toledo. Y en sentido inverso para entrar en el Polígono.