El Mercado de San Agustín estará en funcionamiento en febrero de 2014

Susana Jiménez/Toledo
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Uno de los alicientes de este proyecto es que supondrá la creación de entre 120 y 150 puesto de trabajo directo, y otros muchos indirectos

El arquitecto Luis Moreno presentaba los detalles del proyecto de rehabilitación del futuro Mercado de San Agustín. - Foto: David Pérez

Febrero de 2014 es la fecha tope que se ha marcado la sociedad Gastrozoco S.A., constituida formalmente este mismo martes, para que el Mercado de San Agustín esté funcionando a pleno rendimiento, y poder aprovechar así las sinergias que se puedan generar en el ámbito gastronómico con la conmemoración del IV Centenario del fallecimiento del Greco.

Un proyecto que sus responsables empresariales y técnicos presentaban ayer oficialmente ‘en sociedad’, junto al alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, y la concejal de Turismo, Ana Isabel Fernández, dado el importante «revulsivo» que puede suponer esta iniciativa privada «para el Casco histórico y su comercio».

Un proyecto que comenzaba a gestarse en el verano de 2011 al valorar el gran potencial que a nivel gastronómico tenía sin desarrollar la ciudad de Toledo. Una iniciativa en la que se embarcaban dos sectores hosteleros, Ventura del Álamo y Hostelería del Casco Histórico, y a los que se sumaba AMA Estudio de Arquitectura.

Elegido el enclave, la plaza de San Agustín; resueltos los problemas técnicos que suponía la reconversión de dos viviendas en el futuro gastromercado; con el Greco 2014 en el horizonte, y con la licencia de obra vinculada a la actividad que se desarrollará en él, bajo el brazo, comienza ahora la «carrera» para que dentro de un año sus 24 puestos estén abiertos.

Dinamizador económico. Así lo explicaba el presidente de Gastrozoco, Eugenio Escalona, quien subrayaba el carácter «dinamizador» que tendrá este proyecto, que supondrá la creación de entre 120 y 150 puestos de trabajo, a los que se sumarán otros muchos indirectos, algo de gran importancia en un momento como el actual.

En esta misma línea se pronunciaba García-Page quien se mostraba convencido de que esta iniciativa será la causa de «una mayor potencialidad, energía y dinamismo» económico, «esencial para el Casco Histórico».

Algo en lo que también ocupará un papel muy significativo su apuesta por la «calidad» y unos criterios de exigencia que serán claves en esta oferta de ocio y gastronomía.