2020 no quedará como el año del debut olímpico de Irene Sánchez-Escribano. Apenas sin competiciones, la toledana sí que ha conseguido ser campeona de España de cross por primera vez; el 8 de marzo, en vísperas de la explosión de la pandemia del coronavirus. Tras meses de confinamiento, la toledana no tenía claro que quisiera competir en el Campeonato de España para revalidar su título de los 3.000 obstáculos. Pero el tiempo le ha demostrado que ha vuelto a un nivel espectacular y que ni los rebrotes y ni las incertidumbres van a quitarle la ilusión por su quinto oro. Va a por el repóker.
Será el siguiente fin de semana, del 12 y 13 de septiembre, en Madrid, donde la Real Federación Española de Fútbol ha dispuesto varias sedes para que los atletas no se tengan que concentrar en una instalación. En el caso de la corredora del Adidas, le tocará correr en el estadio Vallehermoso, donde se disputarán las pruebas combinadas y las de medio fondo, fondo, marcha y pértiga. En el Juan de la Cierva de Getafe se celebrarán las vallas y la velocidad; en Moratalaz, los lanzamientos; y en Alcobendas, los saltos.
Sánchez-Escribano ha tenido que vivir una temporada extraña, pero no ha dejado de buscar otros incentivos, como probar los 5.000 metros, en el Gran Premio Diputación de Castellón, donde venció con un registro de 15:39.34. Asimismo, en un mitin celebrado en la ciudad francesa de Cergy-Pontoise, la capitalina volvió con el récord de España de 2.000 obstáculos. Los 6:13.03 supusieron trece segundos menos que la anterior plusmarca, en poder de Tamara Sanfabio desde el año 2006.
Pero volviendo a su prueba favorita, los 3.000 obstáculos, Irene Sánchez-Escribano está dispuesta a salir de Madrid con su quinto título desde que irrumpió como atleta absoluta, tras los conseguidos en 2015, 2017, 2018 y 2019. Será su primera tentativa en la distancia este año por culpa de la COVID-19, pero con los resultados expuestos, queda claro que sigue siendo la gran favorita. Además, algunas de sus rivales no van a estar, como son los casos de María José Pérez, su compañera de entrenamientos y amiga, que se encuentra preparando otros objetivos, y de Blanca Fernández, lesionada. Así las cosas, Clara Viñarás y Carolina Robles se postulan como las candidatas a amenazar su victoria.