La del Jueves Santo fue otra noche en la que todos miraban al cielo, repleto de nubes y con un porcentaje más que elevado de precipitaciones. Finalmente, se erigió en protagonista al acortar considerablemente los pasos de La Misericordia y Nuestra Señora de los Dolores y dejar sin salida a ‘La Madrugada’ de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia.

A las 21 horas no llovía y la Cofradía del Cristo de la Misericordia, más conocida como El Comercio, decidió tomar la salida desde La Colegial aún consciente de que era probable que el agua hiciera acto de presencia.

La talla procesional de la Oración en el Huerto abrió la comitiva después de los estandartes. El conjunto escultórico, realizado por Ravasa en 1928, fue seguido por la Flagelación del Señor, del talaverano Víctor González Gil y fechado en 1950, mientras que la del Cristo de la Misericoridia, que da nombre a la Hermandad, cierra el cortejo procesional. Este último paso es único en la Semana Santa de Talavera ya que representa el Calvario de Cristo a través de cuatro imágenes de madera a tamaño natural con María Santísima, SanJuan y María Magdalena abrazando la cruz.

Doloroso recorte al Jueves Santo sin ‘Madrugada’En la plaza del Pan, cientos de fieles abriendo y cerrando paraguas, aplaudieron las salidas de La Misericordia que bajaron hasta ronda del Cañillo para, a los pocos minutos de salir del templo, recurrir a los plásticos por una lluvia que, aunque ligera, también era continua. Así, los tres grupos escultóricos pasaron por Santa Catalina completamente protegidos por sus plásticos en una procesión deslucida y que obligó a acortar su recorrido.

La Dolorosa. A las 21,20 horas comenzaban a salir de Santa María La Mayor los primeros cofrades de Nuestra Señora de los Dolores, aprovechando igualmente una pequeña tregua del cielo. La Banda Municipal y una plaza delPan llena aguardaba la salida de una talla especiamente bella que comenzó a sembrar ‘guapas’ nada más pisar la calle.

Como novedad este año, la misma salida que cada año se realiza en la iglesia de San Francisco y que éste, por las obras de rehabilitación, lo han hecho imposible.

 La talla, de 1945 y firmada por Víctor González Gil, está precedida y acompañada en su dolor por un séquito de mujeres de luto, mientras que los penitentes, con túnica blanca y capa, cíngulo y capuz verde, marcán el compás de la estación de penitencia.

Con su característico manto vede, con toca, coronada de orfebrería, encajes, brocados y terciopelos, la Virgen de los Dolores inició su recorrido por una plaza delPan que finalmente fue su único paseo por la ciudad, ya que el agua, que empezó suave pero ganó fuerza en pocos minutos, obligó a limitar su salida a una vuelta a la plaza regresando a La Colegial.

Poco después, una lluvia más insistente y continua, llevó a la cancelación de la salida de ‘La Madrugada’ o Nuestro Padre Jesús de la Sentencia y María Santísima de Lágrimas y Amargura, que dejó a una plaza de San Andrés sumida en la tristeza y la desilusión. Un año esperando y, finalmente, no pudo ser.