La escasez de material de protección también afecta a las trabajadoras de la limpieza de edificios públicos (en especial los sanitarios) que, además, han visto alteradas sus condiciones laborales y pueden ver reducidas las plantillas en un 40%.

José Luis Cerro, responsable de la Federación de Limpieza de CCOO, indica que  hay problemas con los Epi (equipo de protección individual) en los hospitales de Talavera y Toledo y en las residencias de mayores.

Todas son empresas privadas contratadas por la Administración pública pero ahora mismo no disponen libremente de su material, les han requisado todo y dependen del Sescam primero y del director de turno, después, para que les lleguen los recursos que necesitan. Además la prioridad es el personal sanitario. «Se nota un poquito de mejoría», pero muy poco, indica.

En el caso de la educación recuerda que dentro de los IES ha quedado suspendido el servicio y a estas empleadas se les va a pagar pero, a cambio, hay una orden de la Junta de Comunidades para que estén dispuestas a echar una mano a hospitales centros de salud, residencias… en previsión de bajas o necesidades mayores.

Cerro corrobora que todo son contratas y que los expedientes de regulación de empleo temporales (ERTE) se plantean  a nivel nacional pero van a repercutir aquí y podría afectar a un 40% de las plantillas de limpiadoras en la provincia de Toledo.

Eso a pesar de tratarse de un servicio esencial. «Por desgracia esta circunstancia va a servir para visibilizar lo importante que es» este trabajo.

Colaborar. Por otra parte, y desde la responsabilidad de los delegados sindicales, «no se va poner ninguna pega» a la movilidad para que estas trabajadoras que vayan a reforzar donde haga más falta ya que «hay que limpiar para evitar los contagios».

Tampoco cree que sea el momento  valorar las empresas que funcionan mejor o peor debido a que es complicado cuando no tienen medios materiales de conseguir Epis ya que es la autoridad quien lo distribuye.

En cuanto a las empresas privadas, como los bancos, se ha producido una marcha atrás. Al principio se redujo el servicio pero luego muchas oficinas bancarias siguen abiertas y han reclamado el servicio de limpieza de nuevo diario.

Una de las quejas es que todas as comunicaciones se hacen vía whatsaap, reducción y ampliación de jornada, con las dudas sobre la efectividad para reclamar luego los derechos laborales.

Aparte, las empleadas están comprando ellas el material (guantes, lejía) para desinfectar todos los días que es lo que les piden, sobre todo zonas donde transitan los clientes. Pero no tienen Epis.