El Pleno de la Mancomunidad de Municipios de la Sagra Alta, compuesta por 14 poblaciones, aprobó por unanimidad el pasado día 17 de diciembre el expediente de modificación de estatutos, tal y como fue publicado el pasado martes en el Boletín Oficial de la Provincia. La finalización de los trámites supondrán la derogación de los estatutos aprobados en 1971.

Los municipios de Borox, Carranque, Cedillo del Condado, Cobeja, Esquivias, Illescas, Numancia de la Sagra, Palomeque, Pantoja, Seseña, El Viso de San Juan, Ugena Yeles y Yuncos forman la Mancomunidad de Municipios de la Sagra Alta, con sede en las oficinas del Ayuntamiento de Illescas.

Este colectivo fue creado hace 50 años para abastecer de agua a los municipios integrantes, pero amplió con el tiempo las funciones, tales como el saneamiento y la depuración de aguas residuales, el servicio de información al consumidor, el mantenimiento de caminos, el archivo, el servicio técnico de asistencia a municipios, la mecanización administrativa o la confección de documentos cobratorios, recaudación y régimen sancionador.

«Estaban muy obsoletas», indicó a este diario la presidenta, la alcaldesa de Yeles, María José Ruiz, como la razón de la renovación de las normas de la Mancomunidad de la Sagra Alta, que precisaba de la modificación para asumir determinadas funciones.

Este colectivo está integrado desde sus orígenes por la mayoría de los municipios, pues solo se incorporó después de la fundación en 1971 la localidad de Seseña. Ya en 1987, hubo una modificación de los estatutos debido a la ampliación de los servicios susceptibles de prestarse mancomunadamente, la incorporación de Seseña como nuevo integrante y la adaptación de los estatutos a la, por entonces, nueva legislación en materia de régimen local.

Los órganos de gobierno y administración de la mancomunidad son el Pleno, la Junta de Gobierno, el presidente, un vicepresidente como mínimo y la Comisión especial de Cuentas, según figura en los nuevos estatutos que estarán ahora un mes a exposición pública para su posterior aprobación definitiva. Una de las disposiciones finales menciona que la aprobación conllevará la formulación de la relación de deudores, a los que se requerirá el pago en un plazo de 15 días. Así, en caso de no satisfacer la deuda, el presidente de la Mancomunidad solicitará de la Junta de Comunidades o de la Delegación de Hacienda de la provinicia la retención y entrega a la mancomunidad de las cuotas pendientes y que pertenezcan a cada ayuntamiento deudor.