Malpica adapta la fiesta de los morraches a la pandemia

Lola Morán Fdez.
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No se abrirá la ermita ni la sede de la Hermandad de San Sebastián en los festejos, sino que se participará de forma individual o en grupos de hasta seis personas

Malpica adapta la fiesta de los morraches a la pandemia

La festividad de San Sebastián en Malpica de Tajo estará este año marcada por la actual situación sanitaria. Así, en esta ocasión no se abrirá la ermita como tampoco lo hará la sede de la Hermandad de San Sebastián donde se reúnen los morraches con el fin de limitar el contacto social y evitar la propagación del Covid-19.

Como recordó a La Tribuna el presidente de esta Hermandad, Gonzalo Vadillo, desde la agrupación se proporcionan cada año los trajes y demás complementos a aquellos vecinos de Malpica que se quieren vestir de morraches para participar en esta tradición en honor a su patrón. Algo que no es posible este año por la pandemia del coronavirus, como tampoco será reunirse en la sede para ataviarse con los tradicionales ropajes de colores rojo, verde y amarillo, así como las máscaras, pelucas, cencerros y varas de madera.

«Lo que se hará es que todas las personas que tienen en sus casas traje, durante el día que sí puedan seguir subiendo la vela a San Sebastián», explicó Vadillo.

La ermita tampoco se abrirá porque no se podían cumplir las medidas de seguridad. «Lo que intentamos es que no haya aglomeraciones, que era lo que se producía y lo que recomendamos es que el que se quiera vestir, que se vista, pero durante todo el día», en lugar de hacerlos todos de manera simultánea.

Como indicó Vadillo, por lo general, en estas fiestas cada día son unos 70 los morraches que se juntan, algo ahora «inviable», como tampoco la cantidad de personas que se suelen reunir en la iglesia. «No se podrían cumplir las medidas de seguridad, por eso hemos tenido que anularlo», recalcó.

Desde este 6 de enero y hasta el próximo día 18 se podrá participar en esta tradición, a la que se anima a hacerlo de manera individual vistiéndose de morrache en su casa y subir la vela al santo hasta la ermita, «pero de forma individual, nada colectivo», sino que si se hace en grupo sea de menos de seis personas, y que, en vez de hacerlo durante la tarde-noche como suele hacerse, se haga «a lo largo de todo el día».

Se recuerda además la obligatoriedad de llevar mascarilla aun vestido de morrache y a utilizar el camino en lugar de la carretera.

La situación de este año hará que este año la fiesta se viva en esta Hermandad, que cuenta con cerca de 500 integrantes, «con mucha pena» pero conscientes de que, a pesar de la dureza de las medidas, lo que prima es «la salud».

Del 19 al 22 de enero se baja la imagen de San Sebastián para celebrar las misas en honor al santo, algo que este año dependerá de la evolución de la pandemia.