Los informes psiquiátricos crecen un 10,3% en el forense

M. G.
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La plantilla realizó más de un millar de informes el año pasado. Estas evaluaciones representan el 28% del total de la actividad anual. Los forenses elaboraron 253 informes de violencia de género

Los informes psiquiátricos crecen un 10,3% en el forense - Foto: David Perez Redactor grafico La Tribuna

El año pasado dejó un reguero de cifras significativas en el ámbito judicial. Al margen del aumento de la sobrecarga, una vieja problemática de años, el Instituto de Medicina Legal también dejó notar el esfuerzo de su plantilla, cada vez con más trabajo en el ámbito de la psiquiatría. Según se desprende de la memoria de actividad, los forenses de Toledo realizaron más de un millar de informes psiquiátricos el año pasado, lo que supone un 28,8% de la actividad total de este servicio. Si bien, lo más llamativo es, sin duda, el aumento en un 10,3%de estos informes respecto al año anterior.

El documento no detalla el origen de este crecimiento en solo un año, pero sí añade que los informes de psiquiatría que más se solicitan corresponden a las incapacidades. En este caso, los forenses realizaron 462 evaluaciones, a las que se añadieron otras 462 relativas a internamientos involuntarios. El resto de la actividad de este servicio se completa con 108 informes sobre las capacidades cognitivas y volitivas y otras evaluaciones psiquiátricas relacionadas con la posibilidad de declarar y la adicción a las drogas fundamentalmente.

Los catorce forenses de Toledo citaron a 2.762 personas el año pasado, si bien, el 29% no acudió a la  cita. Además, se realizaron 1.749 informes de sanidad, de los cuales 1.203 corresponden a agresiones, a las que hay que sumar otras 253 relacionadas con la violencia de género, 100 relativas a la violencia doméstica y otros 156 informes derivados de accidentes de tráfico.

Dentro de esta intensa actividad, estos profesionales evaluaron a 17 detenidos el año pasado, realizaron 139 clínicas extrajudiciales, 13 asuntos ligados a posibles negligencias médicas, 27 agresiones sexuales y otros 80 casos derivados del ámbito social. La estadística se completa con otros 459 informes de los que no se especifica su naturaleza.

violencia de género. Los juzgados de la provincia que comparten esta materia con la propia del juzgado mixto también han solicitado la intervención de los forenses en bastantes ocasiones durante 2018. En concreto, se llevaron a cabo 50 citaciones, algunas de ellas procedían de 2017, pero no todos los citados se presentaron.

De las 29 mujeres víctimas y sus hijos que denunciaron en los tribunales su situación, pasaron por el servicio 23 y se ausentaron 6, tres víctimas y tres menores a pesar de la insistencia en la citación. Una situación similar se produjo con la citación de veinte denunciados varones, ya que cinco de ellos no asitieron a ninguna cita.

necesidades. El equipo de forenses ha logrado una serie de mejoras básicas en el depósito municipal que se les cedió hace tiempo para que llevasen a cabo las autopsias, pero disponen de los «medios mínimos» imprescindibles y continúan sin equipos de extracción de aire para evitar riesgos por contagio a pesar de que se lleva años solicitando. En la memoria se vuelve a resaltar una vez más la necesidad de la construcción del Instituto de Medicina Legal en la calle Dinamarca, ya que el Ayuntamiento cedió unos terrenos hace años y se habló del proyecto antes de la crisis económica.

Por otro lado, la plantilla sigue esperando la puesta en marcha de un laboratorio en Toledo, ya que el actual se encuentra en Ciudad Real. El Instituto de Medicina Legal engloba las dos provincias y dispone de un único laboratorio, pero la actividad se complica cuando el trabajo procede de Toledo y resulta ilógico que el jefe de patología en Ciudad Real se encargue de controlar las autopsias que se realizan en Toledo, como se dejó caer en la memoria anual de 2017. Por tanto, existen dos posibles mejoras, o se pone en marcha un laboratorio en Toledo o el Instituto de Medicina Legal se escinde para que tanto Ciudad Real como Toledo dispongan de sede y de laboratorio. Aun así, sería posible que pudieran continuar compartiéndolo para ahorrar costes.