La Cofradía del Cristo Nazareno Cautivo de Toledo calienta este fin de semana motores de cara a la Semana Santa. En la mañana de hoy, el obispo emérito de Segovia, Ángel Rubio, que también fuera obispo auxiliar de Toledo entregó la medalla a los miembros de una cofradía que este año celebra sus 10 años de vida. Un década en la que ha crecido exponencialmente.

Fue el sábado por la tarde cuando la talla del Cautivo, obra del imaginero Antonio Martínez Rodríguez, procesionó por el barrio del Polígono, donde tiene su sede canónica, la iglesia parroquial de San José Obrero. Para la ocasión los miembros de la banda de tambores y cornetas estrenaron su nuevo uniforme que lucirán también en la moche de Lunes Santo cuando la talla del Cautivo, trasladada el sábado de Pasión a la Catedral de Toledo, procesionará por las calles del Casco histórico.

Antes de la procesión se celebró una eucaristía, oficiada por José Antonio Jiménez 'Quillo'.