Nuevo intento para revitalizar el quiosco del parque de Bélgica, conocido cuando funcionaba como restaurante Amendros. El Ayuntamiento de Toledo ha vuelto a licitar el adecentamiento y la explotación del inmueble, de titularidad municipal, que actualmente se encuentra en mal estado y que despierta las críticas de la asociación vecinal ‘La Ronda’ al considerar que el abandono de este espacio convierte la zona en un punto de inseguridad del barrio de Buenavista, donde se ubica. El concurso ha quedado varias veces desierto, pero el Consistorio ha vuelto a probar suerte con el objetivo de que la situación cambie.

Ha licitado el contrato por un mínimo de 36.000 euros y un periodo de ejecución de ocho años, según consta en el pliego de condiciones del concurso, que se puede consultar en el perfil del contratante del Ayuntamiento. Las empresas o personas interesadas pueden presentar sus ofertas hasta el 14 de febrero a las 14,00 horas.

La adjudicataria se encargará de la gestión del establecimiento hostelero y su correspondiente terraza  con marquesina, pero antes deberá abordar la adecuación del espacio, esto es, el repintado del quiosco, la sustitución del solado, la adecuación de la campana extractora existente o su sustitución por otra, así como la reparación de cierres metálicos, etcétera, según refleja el pliego.

También se deberá encargar del mantenimiento del espacio, de los baños anexos y del espacio libre de la terraza exterior.

El pliego indica que las ofertas se presentarán al alza sobre la cantidad mínima antes detallada, no siendo admitidas aquellas que no alcancen el tipo fijado anteriormente.

El establecimiento cuenta con una cafetería de 245 metros cuadros, de los que son útiles un total de 207, así como una marquesina de 62 metros cuadrados.

El establecimiento se entregará  por el Ayuntamiento acabado (a  falta de reparación de los cierres  metálicos) en cuanto se refiere al  cerramiento exterior del mismo,   así como la distribución de espacios interiores (aseos, cocina, almacenes, etc.) debiendo ser por  cuenta del adjudicatario la adecuación y el mobiliario del mismo en su caso.

Así, el adjudicatario deberá asumir la adecuación del interior del establecimiento (incluido las instalaciones y equipamientos propios  de la cocina) y la instalación de mobiliario interior y exterior.

Respecto a la decoración, «los elementos que se instalen  deberán estar de acuerdo con la  estética general del entorno urbano  en el que se enmarcan», indica el pliego de condiciones.