Diez días tienen por delante los vecinos de Guadamur sin excusas para el aburrimiento. Primero por los actos que programa la hermandad de la Virgen de la Natividad y luego por los que organiza la del  Santísimo Cristo de la Piedad. Y en ambos casos con dos citas a las que todo guadamureño no  puede renunciar, la pirotecnia y las orquestas nocturnas. Ayer le tocó el turno a una espectacular sesión de fuegos artificiales en honor de la Virgen que corrió a cargo de la pirotecnia de Ricardo Caballer. «Los fuegos artificiales son un referente en Guadamur», incide Gutiérrez subrayando al tiempo la calidad contrastada de las pirotecnias que acuden al municipio toledano. «En la noche de hoy podremos disfrutar de un castillo de fuegos artificiales de los mejores de la región», seduce la alcaldesa, cifrando en unas 10.000 las personas que puede reunir esta cita que ya aprovechan para echar un baile porque después de los fuegos, llega la música con la «afamada» orquesta La Isla.

Dice la alcaldesa de esta localidad, Sagrario Gutiérrez, que una de las características de estas fiestas es la tradición, porque con ellas se rinde honores a su patrona y a su patrón, y porque con ellas se ha ido convirtiendo Guadamur en un municipio de referencia en materia pirotécnica en los últimos años. Pero además, subraya Gutiérrez, estas fiestas tienen otra particularidad y es que no tienen edad y el buen ambiente preside cada acto programado. «En cualquier acto ves a todo tipo de público, son fiestas compartidas por jóvenes y mayores y muy reconocidas por los pueblos del entorno», luce orgullosa su alcaldesa deseosa de que este año vuelvan a estar presididas por «una sana diversión» y el disfrute con «moderación». Porque advierte Sagrario Gutiérrez, «el saber estar redunda en que todos podamos disfrutar de las fiestas».