La vida de Bernardo de las Heras se extinguió el pasado 1 de octubre. Murió a los 98 años el único Hijo Predilecto distinguido por El Romeral, un municipio de apenas 600 empadronados en la comarca de La Mancha. Una varita mágica de dos metros y medio de altura en la fachada singulariza la casa del pueblo de este ilusionista que fabricó artilugios durante décadas a los magos españoles para sus espectáculos. Y fue convidado por David Copperfield  para que asistiera a sus actuaciones en España.

Bernardo eligió como nombre artístico el de ‘Profesor Beherman’, pseudónimo formado por las primeras letras de su nombre y de su apellido junto con el de su esposa, Martina.  Precisamente, tras contraer matrimonio en 1947, nació su pasión por la magia. Frecuentaba entonces sesiones de ilusionismo de Fumanchú, los hermanos Alba y Li Chang. Y musculó la afición con la compra de algunos efectos sencillos en La casa de los juegos en Madrid, o con la adquisición de lecciones de ilusionismo en ‘El rey de la magia’ en Barcelona.

«Siempre le recordaremos por todas las veces que nos ha hecho sonreír y maravillarnos con su magia, pero también por su sonrisa eterna, por su amabilidad... Desde aquí un fuerte y cariñoso abrazo a su familia. Nunca dejará de estar en nuestros corazones. Hasta siempre, querido Beherman». El Ayuntamiento de El Romeral despidió a Bernardo de las Heras con estas frases emocionadas al día siguiente del fallecimiento. No en vano, se ha tratado del único Hijo Predilecto nombrado por la localidad.

Desde el principio, Bernardo empezó a elaborar sus propios artilugios y comenzó las primeras actuaciones ante público en colegios de huérfanos, hospitales y demás centros benéficos. Ya en los años 50, obtuvo el carné del denominado Sindicato del Espectáculo con el pseudónimo de ‘Profesor Beherman’ y se codeó con compañeros de la profesión como Manuel Gil, con quien formó un dúo mágico-humorístico con el nombre de ‘Hermanos Beherman’.

Posteriormente, ingresó en el Club de Ilusionistas Profesionales con el carné número 89 el 1 de noviembre de 1962, donde fue elegido vicepresidente en 1990 y, después, socio de honor y vicepresidente honorífico. En los años 60, se incorporó también al Círculo Español de Artes Mágicas y al Club de Payasos Españoles y Artistas de Circo. Bernardo construyó aparatos de magia para la Casa de los Juegos de Madrid, así como para otras prestigiosas: Magicus, Selecciones Mágicas, Magia Estudio, El Rey de la Magia o Juan Mayoral.

«Son muchos los compañeros, algunos entonces aficionados y hoy grandes profesionales, los que han pasado por su taller-estudio para pedirle asesoramiento o algún tipo de juego específico. Es probable que una gran mayoría de magos españoles, por no decir todos, tengan algo fabricado por él: bastones de aparición y desaparición de acero, discos camaleón, coladores, jarras de agua de la India, así como toda una amplia gama de artilugios, con una gran variedad de efectos escénicos y de micromagia», destaca a este diario la familia de Bernardo de las Heras, quien tuvo tres hijos: Jesús, Félix y Bernardo, este último dedicado también a la magia con el nombre artístico de ‘Berni’.

El ‘Profesor Beherman’ se presentaba en el escenario con artilugios fabricados por él, como flores, veladores, cajas de apariciones y desapariciones o bastones. En los años 60, concurrió a congresos y concursos como el noveno Congreso Mágico Nacional con ‘La tintorería mágica’, el Festival Mágico Internacional celebrado en Figueira da Foz (Portugal) o el décimo Congreso Mágico Internacional F. I. S. M. Badem-Badem, en Alemania.

A Bernardo se le conocía también como ‘El mago de las flores’ por números espectaculares con la compañía de su esposa, Martina. También protagonizó varias giras por España con Linda Baker ‘La mujer de hierro’ dentro del espectáculo infantil de Ángelo, así como con circos como el Atlas, el Mundial o el de Teresa Rabal.

Y apareció en los orígenes de Televisión Española y en programas como ‘Gente joven’ o ‘Hola chicos’, así como en Antena 3 Televisión o en Castilla-La Mancha Media. En los años 90, fue reconocido por distintas asociaciones como mago de honor por su dilatada carrera. Ya anciano, en 2009, actuó en el Circo Price de Madrid ayudado por su nieta Alicia. Desde entonces hasta su fallecimiento, dedicó el tiempo a su familia y a compartir sus conocimientos con sus amigos magos, a los que ayudaba a sorprender al público con nuevas construcciones en su estudio-taller.

El Ayuntamiento de su pueblo natal, El Romeral, le otorgó en el año 1998 el título de Hijo Predilecto en una fiesta multitudinaria arropado por compañeros de oficio. «Siempre llevó con orgullo el nombre de El Romeral», apunta su familia, que despidió el féretro con un lanzamiento de naipes. En su pueblo, actuaba con frecuencia de forma desinteresada y construía los fuegos artificales de las fiestas. Ahora, todos los romeraleños lloran a Bernardo de las Heras y al ‘Profesor Beherman’.