El periodo veraniego ha amainado algo las tensiones en la Federación de Asociaciones de Vecinos ‘El Ciudadano’. A pesar del intenso movimiento que hubo en junio y julio entre unas asociaciones y otras, entre la actual junta directiva y distintos colectivos, no se ha creado aún una gestora que lleve temporalmente las riendas de la asociación. Tampoco  se ha producido una renovación de cargos para salir de esta crisis y que el movimiento vecinal vuelva a cobrar fuerza y pueda continuar ofreciendo respaldo a las asociaciones vecinales y, sobre todo, mantenga su voz en temas de ciudad y en otros ligados a la participación ciudadana con normalidad, sin acusaciones ni posturas encontradas.

De momento, todo indica que en septiembre se volverá a hablar de ‘El Ciudadano’. En principio, la presidenta de la federación, Eva Perea, propondrá la convocatoria de una asamblea ordinaria a finales del próximo mes, aunque aún no se ha decidido la fecha, y apuesta por la celebración de elecciones en vista de la situación y la crisis que se ha originado en el seno vecinal.  Aún es pronto  para conocer si se celebrará o no esta convocatoria porque la actual presidenta tendrá que proponerlo en la junta directiva, pero su intención, según ha explicado a La Tribuna, es que se deshaga lo antes posible este nudo que puede terminar ahogando la federación, algo que no quieren ninguna de las dos partes del conflicto porque consideran que se trata de un colectivo muy válido para la ciudad y para las asociaciones vecinales.

«Me da mucha pena todo lo que está pasando y espero que el movimiento vecinal salga más reforzado y con gente nueva». Así de claro lo comenta la presidenta de la federación, convencida de que ‘El Ciudadano’ puede salir adelante a pesar de este duro enfrentamiento. Un grupo de asociaciones vecinales, en el que se integran ‘El Tajo’, ‘La Voz del barrio’, ‘Alcántara’ y Ronda de Buenavista, tienen claro que había que buscar una solución porque la federación había desaparecido de la vida social y política de la ciudad y no participaba en los distintos problemas de los barrios, con lo que propusieron la creación de una gestora.

Si bien, en el lado opuesto se sitúan los actuales cargos unipersonales que llevan meses apuntando que no se les ha dejado trabajar y algunos colectivos vecinales quieren manejar la federación. A este cóctel también se sumó un nuevo conflicto, la inclusión de Helena Galán, la exconcejala de Participación Ciudadana, en el equipo que integra Eva Perea, una propuesta que no cayó bien a distintas asociaciones que rechazan su entrada, entre ellas, la de Palomarejos, por las continuas discusiones mantenidas con ella en la anterior legislatura.

Conflictos aparte,‘El Ciudadano’ se encuentra ahora en un periodo de ‘stand by’ a pesar de que a principios de julio prácticamente se daba por hecho que al final de mes estaría operativa la gestora, que esatba prácticamente constituida a falta de darle forma legal porque la ausencia del secretario de la federación impidió el 2 de julio la aprobación del acta anterior y la iniciativa quedó en el aire a pesar de que contaba con el apoyo de siete de las diez asociaciones presentes en la asamblea extraordinaria celebrada el pasado 18 de junio.

Perea mantiene que los cargos unipersonales están en funciones por mucho que desde algunos colectivos vecinales, como ocurre con el ‘Tajo’, insistan en que los cargos están revocados. La junta directiva se defiende apuntando que mientras no se apruebe el famoso acta los cargos siguen operativos. También se avisó en una de las reuniones de que si algún colectivo vecinal intentara invalidarlos habría que estudiar si era legal o no porque en esa convocatoria, que aún anda sin la aprobación del acta, se modificó el orden del día, algo ilegal para la actual junta directiva porque no asistieron todas las asociaciones, y legal para los colectivos que querían una gestora, según los estatutos de la federación.

Por tanto, Perea entiende que lo más acertado sería convocar esa asamblea ordinaria para rendir cuentas de este año, ya que esta fuerte crisis lo ha impedido, pero ha propiciado críticas «falsas» que dicen que la junta directiva no presenta las cuentas desde hace dos años.

En principio, tras el resultado de esa futura convocatoria ordinaria habría que estudiar también la convocatoria de una extraordinaria para tratar la posibilidad de plantear elecciones para la renovación de cargos. Perea confía en que el tema de la gestora sea agua pasada porque está dispuesta «a impugnar el acta» si ‘El Tajo’ continúa con esta propuesta.

el futuro de perea. La presidenta recuerda que cuando ella accedió a la presidencia de la federación «nadie quería ni había voluntarios» para llevar la gestión. De momento, no tiene claro si ella seguiría o no porque primero cree que se debe buscar la solución a la fractura que se ha abierto en el colectivo desde hace meses. «Me lo tendría que pensar mucho», insiste y prefiere ser prudente en este tema porque el conflicto le ha provocado  un gran disgusto y ha tenido que lidiar con críticas referidas a su vinculación política con el PSOE.