Christian López ya tiene otro día señalado en el calendario para seguir inscribiendo su nombre en el Guinness World Records. Será el próximo viernes 12 de julio en la localidad toledana de Torrijos, donde el atleta de Cabañas de la Sagra intentará abordar otros cuatro récords más. Así, en caso de superarlos, alcanzaría ya los 21 desde que en noviembre de 2017 decidió hacer el mayor número de subidas en una hora a uno de los torreones del Alcázar de Toledo.
En esta ocasión, el cabañil volverá a la carga con actividades que conjugan velocidad y habilidad. Además, gracias a la colaboración del Ayuntamiento deTorrijos, que este año celebra el título concedido de Villa Europea del Deporte, le va a preparar un escenario de relumbrón para estos cuatro desafíos. Será en la calle Manuel Benayas, una de las más céntricas del municipio, para aprovechar la afluencia de gente a los comercios y bares y que así sean más personas los testigos de Christian López.
El primero de los cuatro consistirá en correr lo más rápido posible 100 metros hacia atrás cargado con una mochila de 30 kilos. La organización le pide bajar de 30 segundos para conseguirlo. Después, se atreverá con los 50 metros más rápidos con aletas de natación y tendrá que rebajar el actual tiempo registrado de 11.44.
A continuación, el corredor toledano se pasará a dos récords más relacionados con las zancadas. Uno de ellos consistirá en realizar el mayor número de zancadas hacia adelante en un minuto. El Guinness World Records le exige más de 70 para conseguir otra acreditación más y, además, tendrá que hacerlo con una técnica exacta en la que, después de mantener la rodilla atrás en el suelo, deberá levantarla hasta arriba, por lo que no le servirá mantener el cuerpo semiflexionado. Sin duda, otro enfrentamiento más con su cuerpo y con la física. El cuarto y último será igual que el anterior pero cargado con una mochila con 10 kilos peso. En esta ocasión, los organizadores le piden más de 50 zancadas para conseguirlo.
Christian López viene de alcanzar siete récords en una misma mañana con pelotas de ping pong y retrorruning haciendo malabares, pero le queda tiempo para seguir entrenándose fuerte y compaginarlo con su vida diaria. Reconoce que ya está en los números exigidos e, incluso, según se vea la próxima semana, López podría incluir un quinto récord Guinness más en Torrijos, el de los 100 metros más rápidos corriendo hacia atrás. Debería estar por debajo de 13.60 y ya se ve cerca.