A Julián Baños, propietarios del negocio Entorno Toledo, situado en la cuesta de la Ciudad, número 5, ya no debería sorprenderle nada. Desde el pasado mes de agosto, el local en el que quería crear el museo del agua de Toledo (con dos pozos árabes de agua pura y el único de origen romano de la ciudad) se ha convertido en su mayor quebradero de cabeza. Primero fue el fuel que contaminó sus tres pozos, un combustible que a la postre se descubrió que provenía de un vecino inmueble del Arzobispado. Después, llegarían las aguas fecales que caen del techo, sobre unas cuevas que son los cimientos de un edificio protegido.

Pues sí. A Julián Baños le pueden sorprender, y todavía desesperar, nuevas situaciones en el local. El Ayuntamiento de Toledo procedió ayer, a través de la concesionaria Tagus, a limpiar por segunda vez el líquido contaminado de la cueva. En esta ocasión, retiró cuatro mil litros. Pero de inmediato el trabajo se iba al traste. Solo media hora después de que concluyeran los trabajos, denuncia Baños, volvía a subir el nivel freático, por supuesto, con agua contaminada por gasoil. Y la desgracia no quedó ahí, un cuarto de hora más, y las paredes de la cueva comenzaron a llorar aguas fecales.

El propietario del negocio trató de ponerse en contacto con los técnicos municipales y los responsables de Tagus y lo consiguió hacer gracias al agente medioambiental de la Junta que está llevando el caso. A su juicio lo que el Ayuntamiento está haciendo hasta ahora «es tan solo un parche». Una vez localizada la fuga de gasoil, entiende Baños que el Consistorio es el responsable de encontrar la fuga de aguas fecales que le está afectando.  Hasta el momento, la repuesta ha sido que el problema parece estar localizado en la comunidad de Trinidad 5. Pero al empresario turístico no le vale. Cree que tiene que llegar ya una solución, porque el Consistorio es el responsable, no le toca a él comenzar a hacer requerimientos. Hay que tener en cuenta que estas aguas salen de forma intermitente, «por lo que deben cortar en algún lado».

Entorno Toledo se inunda de nuevo de fuel tras otra retirada

Con el líquido marrón, mezcla de gasoil y aguas fecales, Baños ve imposible seguir trabajando por la pestilencia que tiene en la oficina. Así es imposible que se acerquen los clientes y, desde luego, enseñar las instalaciones y los pozos, como venía haciendo durante los últimos meses. Exige una solución definitiva; que le saquen el gasoil, aunque sea a diario, para poder trabajar, pero sobre todo que llegue la solución definitiva.

Fuentes municipales han confirmado que aunque esta vez se ha retirado más líquido de Entorno Toledo, tenía menos el gasoil. La novedad es que también había trazas de amoniaco. Eso, apuntan los técnicos municipales, no significa que lo que están cayendo sean aguas residuales. Aunque con mucha precaución todavía, barajan la posibilidad de que no haya siquiera una fuga, sino que sean aguas de lluvia filtradas, que se estén llevando la mucha suciedad del subsuelo. Unos técnicos municipales, apuntan las mismas fuentes, que van a continuar «muy pendientes» del problema. Esperan estabilizar la situación, y volverán a retirar más líquido las veces que haga falta.

De hecho, a mediodía de ayer Tagus también retiró agua contaminada de fuel del Pozo de los Deseos, situado en la calle Trinidad.