«La rueda de Santa Catalina, símbolo de los estudios universitarios de Toledo, volvió a girar hace cincuenta años, con la creación del Centro Universitario. Una singladura que devolvió los estudios superiores a esta ciudad y que fue semilla, hoy con vigorosas raíces, de la actual Universidad de Castilla-La Mancha». La vicerrectora Fátima Guadamillas presentó ayer, en el Edificio Lorenzana, antigua sede del Centro Universitario de Toledo, el acto conmemorativo organizado por el 50 aniversario de esta institución. «Aquellos lejanos años -continuó, acompañada por el rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado- fueron la prueba de que en aulas espartanas también se puede desarrollar una buena universidad. Como antigua alumna, conservo de entonces valores como la humildad, el conocimiento o la sencillez».

El acto contó con los testimonios de antiguos alumnos y profesores de las diferentes secciones del Centro (Letras, Químicas, Empresariales y Derecho), así como de representantes del personal de administración y servicios, entre ellos Gervasio Fernández Riol, que fue su gerente. Entre los primeros es posible destacar a Martín Molina López, en representación del alumnado de la primera promoción (1969-1970), quien destacó la llegada de los estudios universitarios «para aquellas familias que no podían permitirse que sus hijos estudiasen en Madrid». Posteriormente, intervinieron Ricardo Izquierdo e Isidro Sánchez Sánchez (Área de Humanidades), José Luis de la Peña Rubio y Raquel Payo Puebla (Químicas), Jesús Fernando Santos Peñalver y Pedro Jiménez Estévez (Empresariales) y Francisco Javier Díaz Revorio (Derecho).

Entre los asistentes estuvieron también la consejera de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Rosana Rodríguez, el presidente de la Diputación de Toledo (institución que tuvo gran protagonismo durante los primeros años delCentro Universitario), Álvaro Gutiérrez, y el concejal Juan José Pérez del Pino, estrechamente vinculado al Centro Universitario,

La rueda de Santa Catalina no se detiene - Foto: VÁ­ctor Ballesteros

Con motivo del aniversario, el Servicio de Publicaciones de la UCLM ha editado el libro 1969-2019. Del Centro Universitario de Toledo a la Universidad de Castilla-La Mancha. Este volumen ha sido coordinado por Antonio Casado Poyales, responsable de la Biblioteca del Campus de la Fábrica de Armas y antiguo alumno del Centro, quien ayer lo presentó. Contiene textos de Adolfo de Mingo Lorente (publicados en el diario La Tribuna el pasado 11 de agosto), Blanca Rodríguez Fernández, Enrique Jiménez Silva, Fernando Martínez Gil, Gervasio Fernández Riol, Luis Arroyo Zapatero, Manuel Álvarez Romero y el propio Casado Poyales, además de una quincena de testimonios de antiguos alumnos y profesores.

El homenaje incluye también una exposición de medio centenar de fotografías, instaladas en el patio del Edificio Lorenzana hasta el 7 de febrero de 2020, que recogen los primeros años de vida universitaria de Toledo tras la restitución de este tipo de estudios. Fueron realizadas por la fotógrafa María Teresa Silva (†2012) y forman parte del Archivo Vasil, que gestiona Enrique Jiménez Silva. La muestra, en cuyo montaje ha colaborado la Escuela de Arquitectura de Toledo, bajo la coordinación de la profesora Adelaida del Puerto, podrá ser visitada de 10,00 a 20,30 horas, de lunes a jueves, y los viernes de 10,00 a 15,00.

Exposición virtual. Además de la exposición de fotografías del Archivo Vasil instalada en el patio del Edificio Lorenzana, el Centro de Estudios de Castilla-La Mancha ha impulsado un nuevo proyecto para perpetuar la memoria fotográfica del antiguo Centro Universitario. Se trata de un nuevo álbum de FlickR donde se preservarán y darán a conocer las fotografías que los antiguos alumnos, profesores y personal deseen compartir.