Izquierda Unida ha denunciado que la supresión de la venta de billetes en las estaciones de tren de Talavera, Illescas, Torrijos y Oropesa es «un paso más» para «el desmantelamiento del tren convencional» y hacia la «privatización» del sector. Así lo ha trasladado en rueda de prensa en Talavera el coordinador provincial de IU Toledo y diputado provincial de Unidas Podemos, Mario García, acompañado de la portavoz de IU en Talavera, Verónica Mora; el concejal de IU Torrijos, Ángel Carrasco; y el edil de Unidas Podemos por Illescas, Andrés García.

Para García, el tren convencional es «la mejor herramienta útil para el desarrollo» de la provincia, mientras que esta medida supone «una clara apuesta por el tren de alta velocidad», dado que este cierre conlleva «dificultar el uso del tren convencional» y su «paulatino desmantelamiento», además de mermar la «calidad» de un servicio «esencial» para «frenar la despoblación».

El coordinador provincial de IU ha recalcado además que esta medida se lleva a cabo tras la reciente celebración en Madrid de la Cumbre del Clima, en la que se ha puesto de relieve la necesidad de apostar por sistemas de transportes medioambientalmente sostenibles como el tren convencional para disminuir la emisión de carbono a la atmósfera. Por ello, ha manifestado que esta Cumbre se convierta al final «en un paripé», apelando a los gobiernos a «tomar decisiones y posturas valientes y no solo de manera pública».

En este sentido, ha instado a la Junta de Comunidades y a la Diputación Provincial, a «tomar partido» y realizar «declaraciones y trabajos institucionales donde se manifieste que están por la defensa del tren convencional y no por el desmantelamiento que está haciendo ADIF, paso a paso, de este servicio público de transporte».

Sobre las declaraciones de la portavoz del equipo de Gobierno de Talavera, Flora Bellón, quien informó el pasado jueves que Renfe asumirá esta venta de billetes en la estación de Talavera a través de una contrata, el coordinador provincial de IU ha criticado esta «privatización del servicio», algo que «sale más caro a los ciudadanos».

Además, ha dicho que si bien desde el Ayuntamiento destacan las «buenas relaciones» de la alcaldesa con ADIF y con Renfe, «o no son tan buenas esas relaciones, que hoy no se venden billetes, o no se enteran de la misa la mitad y se han enterado por los medios de comunicación o por los sindicatos de que iban a quitar la venta de billetes». Así, ha recalcado que la alcaldesa de Talavera «debería haber tomado medidas antes» puesto que ahora no hay venta de billetes en la estación talaverana.

Dificultad añadida. Para la portavoz de IU Talavera, Verónica Mora, «una vez más a Talavera nos torpedean» con esta medida, insistiendo en que esta supresión dificulta el acceso al servicio de manera especial a los usuarios sin acceso a internet o sin tarjeta bancaria y supone «una dificultad añadida» en una ciudad y una comarca con una alta tasa de desempleo.

Por su parte, Ángel Carrasco, concejal de IU Torrijos, ha hecho hincapié en que, a pesar de los medios alternativos que se han dispuesto para la compra de billetes, habrá determinadas funciones que en el tren no se podrán hacer como la adquisición de abonos mensuales o de diez viajes, además de desconocer si se aplicarán los descuentos que sí se realizan al comprar en ventanilla. «Esto va a dificultar aún más el transporte en tren», ha dicho, para subrayar que el problema afecta tanto a los municipios donde se suprime esta venta de billetes como a sus comarcas y apuntó a una posible pérdida de puestos de trabajo en el sector.

Para el concejal de Torrijos, «la solución que se ha dado por parte de ADIF es dejarle el marrón a los ayuntamientos», lo que hará, ha apuntado, que aquellos que sí puedan contratar a una persona para la venta presencial de billetes en la estación de tren lo hagan además «en detrimento de otras partidas del presupuesto municipal». Sobre este punto, el coordinador provincial ha recordado que esta medida se ha adoptado ya en el municipio de Villacañas.

También Andrés García, concejal de Unidas Podemos por Illescas, ha manifestado que esta supresión «va misteriosamente conjunta a la liberación del sector ferroviario, ya en ciernes» y pretende «un detrimento del servicio para justificar esta situación».

Además, García ha querido subrayar que en el caso de Illescas afectará tanto a los 30.000 habitantes censados como a los 120.000 de toda la comarca de La Sagra, que, como ha destacado, «se está convirtiendo en un enclave para empresas de grupos logísticos que están sumando más a los problemas de saturación que hay en la autovía A-42», por lo que la vía de escape es el tren convencional y el de cercanías, ha precisado.