No es, desde luego, la primera res brava que escapa del matadero en Toledo y se da un paseo por la ciudad. Hace años, un toro fue abatido en el paseo de la Rosa. Pero nunca antes ningún animal había llegado tan lejos como la vaca que, metiéndose  por caminos, llegó nada menos hasta el Salto del Caballo, donde pudo acorralarla la Policía Local para que la matara un cazador.

Habitualmente, y más ahora con la pandemia, se sacrifican reses bravas en el matadero municipal, situado en el polígono industrial. Una de ellas se escapaba esta mañana, sobre la una.

A la altura del kilómetro 2 de la N-400, sentido Toledo, la localizó un conductor de una ambulancia, que de inmediato llamó al 112. En contacto con el servicio de emergencias, el conductor fue siguiendo a la vaca e indicando su recorrido. Así lo hizo hasta Santa Bárbara, donde se cruzó una valla a la derecha, hacia Grúas Mendoza. Allí cruzó la vía del AVE por encima del puente elevado de la Alberquilla. Por allí el animal deambuló por los campos, camino de Azucaica, en un entorno en el que dio algún susto a los deportistas que suelen correr por la zona.

Escapa del matadero una res brava hasta el Salto del CaballoEn el Salto del Caballo. Finalmente, llegó la Policía Local y se pudo ir el conductor de ambulancia. Esta siguió al animal hasta el Salto del Caballo, donde quedó acorralado. Los agente, apunta el concejal Juan José Pérez del Pino, no quisieron disparar con pistola, porque tenían que acercarse mucho y si fallaraban y podían poner más nerviosa todavía a la vaca brava. De forma que llamaron a un cazador conocido que fue quien la abatió.