Con 600 millones de euros se ha hecho mucho, pero no ha sido suficiente porque todavía queda tarea. Someramente se podría haber resumido así el balance que hace el Gobierno regional de los resultados de los ejes de formación y empleo del Pacto por la Recuperación de Castilla-La Mancha, que a su vez es el punto de partida para el nuevo pacto, el de Crecimiento y Convergencia.
Esos 600 millones de euros han ido a políticas de empleo y de formación. La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, resaltó que se ha reducido a la mitad el número de familias con todos sus miembros en el paro, que se ha bajado en once puntos la tasa de desempleo (del 27% al 16%) y que «mucha gente que estaba desempleada y tenía dificultades incluso para afrontar una entrevista de trabajo, hemos conseguido insertarla en el mercado laboral».
Pero ahora toca hacer «políticas mucho más de bisturí», como avanzó la consejera poco antes de entrar a la comisión de seguimiento de los ejes de empleo y formación de este pacto, que por cierto antes eran dos ejes y ahora se integrarán en uno. Señala que habrá que hacer «mayor hincapié en las zonas y sectores más vulnerables». Aquí mencionó a las mujeres, los jóvenes y las áreas que sufren el problema de la despoblación en el medio rural.
¿Y cómo se hará ese hincapié? Entre las ideas que tiene Franco, subraya la importancia del trabajo de las oficinas Emplea y de los servicios de orientación a la hora de hacer itinerarios personalizados y de hacer una «mayor intermediación entre la oferta y la demanda». Esa conexión con el mercado también la quiere profundizar en la oferta que se da de Formación Profesional, intensificando sectores al alza y potenciando que esa formación termine con «certificados de profesionalidad».
Franco expuso que quieren un centro integrado de Formación Profesional en cada provincia. Destacó que ya tienen dos y que han dado un impulso a los centros nacionales de referencia.
Han llegado a 46.500 trabajadores y 9.500 autónomos en cuatro años
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, reivindicó que las políticas que se han consensuado en empleo y formación «han servido para dar impulso a la región en años que han sido duros porque veníamos de una crisis muy fuerte». Apuntó que las acciones dirigidas a autónomos del Pacto por la Recuperación han permitido llegar a 9.500 en la pasada legislatura. Y si se trata de políticas para favorecer la empleabilidad de personas que tienen más dificultades, Franco señaló que así han llegado a 46.500 trabajadores de la mano también de diputaciones y ayuntamientos.
Eso tiene también su correspondencia en millones de euros. En el caso de las políticas de autónomos se han invertido más de 25 millones. «Estamos valorando los últimos expedientes después de la última convocatoria», apuntó, «hemos conseguido equilibrar un ecosistema de apoyo al emprendimiento para dar apoyo a los proyectos que se inician».
Para favorecer la empleabilidad de las personas con discapacidad la inversión ha superado los 60 millones de euros. Pero el Pacto por la Recuperación era más que políticas de empleo y formación. Franco expuso que la inversión por este conjunto de medidas ha superado los 3.650 millones. «Hemos superado con creces el presupuesto», destacó.