La fase arqueológica precede al derribo en Arco de San Pedro

Lola Morán Fdez.
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Se descarta hallar restos de la antigua iglesia de San Pedro pero se están encontrando «sorpresas» en la casa patio situada en esta misma propiedad

La fase arqueológica precede al derribo en Arco de San Pedro - Foto: Cedida por Marcos Muñoz (ArqueoHispania)

Las labores arqueológicas iniciadas hace algo más de una semana en el edificio de la calle Arco de San Pedro que ocupaba una tienda de muebles marcan el comienzo del proyecto que dotará de un nuevo inmueble y una nueva imagen a esta zona del Casco de Talavera. Unas labores que ya han permitido descartar que se hallen restos de la antigua iglesia de San Pedro que se ubicó en el pasado en este espacio, pero que pueden desvelar otra serie de hallazgos en la casa patio que forma parte de la misma propiedad y del mismo proyecto constructivo.

El director del control arqueológico de las obras de demolición del edificio de Merkamueble, Marcos Muñoz, explicó que el proyecto afecta a una manzana entera ubicada entre las calles Arco de San Pedro, Vicaría Vieja y la plaza de San Pedro. Contempla dos edificaciones principales, una de hormigón, vidrio y acero de la década de 1950 en la que se construyó el edificio destinado a venta de muebles y con acceso por la calle Arco de San Pedro. Como indicó Muñoz, esta edificación coincide «justo con todo el perímetro exacto donde estaba la antigua iglesia parroquia de San Pedro, fundada en el siglo XII y principios del XIII», atendiendo a documentación de los años 30.

El arqueólogo explicó que en una excavación que se hizo en su día y en las catas realizadas no se han encontrado sin embargo restos, tan solo rellenos, y se cree que «restos arquitectónicos constructivos de la iglesia de San Pedro no hay nada ya».

En cuanto a la edificación actual de tienda de muebles, el arqueólogo confirmó que se derribará en su totalidad puesto que carece de cualquier tipo de protección y «es un elemento dentro del Plan Especial de la Villa discordante».

Casa patio. Sin embargo, no es el caso del edificio que forma parte de esta propiedad y que da a la plaza de San Pedro y a la calle Vicaría Vieja, donde hay una casa con dos patios, uno exterior y otro interior del siglo XVII, de la que se están encontrando incluso indicios del siglo XVI, según indicó Muñoz.

Se trata, como explicó, de «una casa típica talaverana castellana espectacular, de las pocas que quedan en el Casco». Al respecto, el arqueólogo quiso destacar que, gracias a Mercadona, «se va a poder rehabilitar y reacondicionar un inmueble que está dentro del Conjunto Histórico del Casco que, si no es por la iniciativa privada, no llega a producirse». En este sentido, destacó que supone una gran inversión acometer esta actuación, a través de la cual se hará un estudio constructivo de todo el edificio con una lectura arqueológica de paramentos y unos sondeos de peritación previos a la intervención propiamente en sí para comprobar el sistema de cimentación.

Esta casa patio cuenta con cuatro galerías y un patio exterior que da a la plaza de San Pedro. La fachada de esta casa patio es del siglo XVIy XVII de época moderna, típicamente castellana, y para poder intervenir en ella, rehabilitarla y acondicionarla se hará un estudio previo de los paramentos, de los acabados, con lectura arqueológica de los alzados, y se recurrirá a tecnología con vuelo de dron para hacer ortofoto vertical de los alzados y de planta.

El siguiente paso será hacer calicatas murarias para comprobar si hay huecos tapados y algún tipo de arco o pintura fosilizada enterrada detrás de todas las capas de cal y pintura de las paredes. Se harán además sondeos arqueológicos en las cimentaciones.

Protección estructural. Dentro del Plan Especial de la Villa y de la declaración de Conjunto Histórico, la normativa del POM dicta que este inmueble tiene una protección estructural y, como tal, debe contar con un control y un estudio arqueológico previo, que es lo que se está llevando a cabo. Deberán clasificarse todos los elementos singulares para la gestión patrimonial. Así, en este caso debería conservarse la fachada y aquellas estructuras que se consideren relevantes desde el punto de vista patrimonial.

Hasta el momento, se han iniciado los estudios previos y se están realizando las calicatas murarias para ver el tipo de fábrica que tienen y el próximo paso serán los sondeos arqueológicos.

Ya se han hallado pinturas dentro de la casa que habrá que valorar y después el proyecto arquitectónico determinará si se conservan. Además, ya antes de excavar se ha encontrado un solado de granito, una serie de losas que están enmarcando el patio exterior y una fase importante con un tipo de solado típico encachado de piedras de río.

El arqueólogo señaló que en este inmueble se hicieron además muchas intervenciones posteriores, sobre todo a lo largo del siglo XIX, como se está viendo durante la lectura de paramentos, en el proceso de la cual se ha podido clasificar una fase de la Guerra de la Independencia. De otro lado se ha observado otra fase importante del XIX en la que se enmarcan unas pinturas murales y elementos como columnas de forja, que se plantearán para su conservación y posterior integración en el proyecto.

Los trabajos arrancaron hace algo más de una semana y se prevé que el seguimiento arqueológico se prolongue entre uno y dos meses.