La nueva actuación urbanística a punto de iniciarse entre La Colegial y Ronda del Cañillo supondrá la construcción de un complejo residencial o de equipamiento aún  sin decidir, que tomará forma según avancen los trabajos de urbanización. Por el momento, según indicó Miguel Ángel Sánchez Blázquez, arquitecto y director del PAU y de la actuación urbanizadora, son alrededor de 5.000 metros  cuadrados urbanizables aún sin definir, con una edificabilidad posible de 3.000 metros cuadrados sobre rasante.

Una de las posibilidades es la construcción de un aparcamiento público, con unas 80 plazas públicas y privadas, para el que no se termina de encontrar rentabilidad, aunque sin descartarse aún ya que podría ejecutarse en el subsuelo.

En la parte superior, sobre rasante, son varias las opciones barajadas. La más probable es una promoción de 30 viviendas que abre un nuevo foco de construcción en la ciudad, en la zona urbanística más valiosa en los últimos años, precisamente por su ubicación y por la carencia de suelo en el Casco Antiguo. La demanda de estas viviendas sería alta por lo que actualmente es la alternativa con más puntos, aunque debería hacerse de tal manera que no quite la visión de La Colegial desde el río.

Viviendas, aparcamiento o un hotel-parador como opciones - Foto: Manu ReinoMás allá del ámbito residencial, también está sobre la mesa el desarrollo de actuaciones comerciales en el ámbito de la restauración, la hostelería o incluso algún hotel. En este sentido, cabe destacar que su cercanía con la zona más monumental de la ciudad y su ubicación junto al río Tajo, lo harían especial para el tantas veces propuesto parador de Talavera, proyecto que también se barajó para la cercana Casa de los Canónigos. No obstante, todo sigue en el aire a la espera de la evolución del plan urbanístico.

Imagen de Talavera. Sea lo que fuera, la nueva edificación se unirá a la fachada sur de la ciudad, mejorándola en un entorno emblemático, poco cuidado hasta ahora pero muy revalorizado en los últimos tiempos. «Es muy importante, el tema hay que llevarlo bien, el Ayuntamiento tiene que tener muy claro lo que quiere que se haga, porque va a ser la imagen de Talavera», indica el arquitecto.

Entre los posibles proyectos, un boceto (en la imagen superior junto al plano del PAU) perteneciente al inicio del Plan Especial de la Villa «donde vienen definidas las alturas, qué tipo de edificación o fachadas queremos» y que Sánchez Blázquez ha querido respetar como obra de su redactor, Santiago Rodríguez Gimeno. «Él lo levantó y lo hizo muy bien y vamos a intentar seguirla». Se trata «de una vuelta atrás, a lo que fue Talavera hace más de 100 años» y curiosamente se plantea como la imagen de la ciudad del futuro.

El interés por iniciar este desarrollo no es solo del grupo de propietarios, sino también del Ayuntamiento que quiere aprobarlo definitivamente en uno de los próximos plenos, indicó Carrillo, al que los propietarios agradecen su trabajo para sacarlo adelante. El objetivo es que las obras puedan dar comienzo el año que viene.