Toledo celebra hoy el Día Internacional de la Mujer. Los colectivos feministas no han querido que la fecha sea una víctima más de la pandemia y han organizado un completo programa de actos, con actividades y charlas online, que concluirá esta jornada con un total de tres concentraciones públicas y una cadena humana.

El 8M se dejará notar hoy en las calles de la ciudad. La Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha no ha seguido los pasos de su homóloga en Madrid y ha dado luz verde a la celebración de estos cuatro actos.

En la capital de España todos los eventos del 8M en las calles han sido prohibidos «por motivos de salud pública», mientras que en la capital de Castilla-La Mancha la autorización sí se ha producido, pero con reparos, ya se ha «desaconsejado» la celebración de cualquier acto con motivo del Día de la Mujer aludiendo a la pandemia.

Desde la Plataforma 8M Toledo, uno de los colectivos que hoy saldrá a la calle «sí o sí», tienen muy claro que se les mide con distinto rasero respecto a otros muchos manifestantes, y no dudan en denunciarlo.

«El PSOE no quiere que este año salgamos a la calle, porque no se van a hacer la foto con nosotras», explica Ana Miranda, desde la Plataforma 8M, sobre los motivos de esta situación.

En opinión de su colectivo, el partido en el Gobierno les ha sorprendido mucho, tomando una decisión, y unos reparos, que se podían esperar «desde la derecha y la extrema derecha», pero que para nada pensaban que llegaría desde un PSOE al que critican «su actitud paternalista». Especialmente la de ministra de Sanidad, Carolina Darias.

«Entendemos la situación y el temor. No queremos matar a nadie. Somos conscientes. Pero este día hay que reivindicar y pelear de manera ordenada», afirma Ana Miranda, que garantiza que todos los actos que se han organizado desde la Plataforma 8M Toledo han contado con «mucho trabajo para no poner en serio la salud de nadie».

No en vano, recuerda, muchas de las mujeres que integran la plataforma han estado, y aún están, en primera línea de la pandemia. «Han muerto muchas cuidando y atendiendo enfermos, trabajando, y es doloroso que ahora pretendan coartar más las libertades de las mujeres, porque somos las que más hemos perdido en la pandemia», reivindica Miranda.

Y es que, entienden que no se les está dando el mismo trato que a otros colectivos que, durante la pandemia, y con peores datos de contagios, se han echado a las calles sin problema ni polémica para protestar por su situación económica o por su malestar político. «No vamos a renunciar a estar en las calles, como no han renunciado otros colectivos», indican, para recordar que «se ha permitido manifestarse hasta a los negacionistas, que se sabía que no iban a respetar las medidas, y con una tasa de contagios mucho más alta».

Por eso, lamentan los intentos de limitar su derecho a manifestarse hoy y reiteran que cumplirán escrupulosamente con todas las medidas sanitarias y de distancia social.