El pasado 16 de junio cuatro familias de cinco residentes fallecidos durante la primera oleada de la pandemia de coronavirus en la Residencial Social Asistida San José presentaron ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Toledo una denuncia en la que acusaban al centro de homicidio imprudente y omisión del deber de socorro.

Analizado su escrito, un juez ha considera pertinente abrir diligencias penales y ha solicitado formalmente a la Fiscalía de Toledo que inicie una investigación de los hechos ocurridos en la residencia, situada en el barrio de Azucaica y dependiente de la Diputación Provincial, o incorpore esta denuncia a las investigaciones que de oficio esté llevando a cabo en relación a las muertes en residencias durante la pandemia.

La denuncia presentada en junio carga contra el gerente de la residencia, la diputada de Educación, Cultura, Igualdad y Bienestar Social en la Diputación, la diputada de Bienestar Social y Sanidad en la residencia y la propia Diputación de Toledo como responsable directa del centro.

Los familiares que han interpuesto la denuncia han recibido con satisfacción la apertura de una investigación por parte de la Fiscalía, ya que ellos únicamente quieren que se aclare la muerte de sus familiares y, de ser necesario, se depuren responsabilidades.

«Reprochan falta de tranparencia, porque nadie les informó de nada, y que les negaran a sus seres queridos la asistencia sanitaria hasta que ya fue muy tarde», explica el abogado de la acusación, Francisco González, sobre un proceso que deberá resolverse en las próximas semanas.

La RSA San José fue duramente azotada por la Covid-19 durante el estado de alarma, registrándose allí durante esos meses un total de 61 fallecimientos. De ellos, 22 se confirmaron como consecuencia directa del coronavirus, mientras que 31 casos se fijaron como sospechosos y ocho muertes fueron documentadas como naturales. A comienzos de este mes, el 7 de septiembre, la Diputación  comunicó un brote de 65 casos positivos en el centro, pero sin que de momento haya que lamentar fallecidos.