Mañana comienza la campaña de vacunación en Castilla-La Mancha y, como todos los años, lo único que hay que hacer es ir al centro de salud o consultorio para informarse. El Servicio de Salud ha adquirido 350.000 dosis, que son casi 38.000 más que el año pasado, lo que supone una inversión de 900.000 euros. Pero es una inversión que bien merece la pena, porque la vacuna es el método más efectivo para prevenir una enfermedad que «puede ser grave y causar la muerte en casos sensibles», tal y como recordó esta mañana el director general de Salud Pública, Juan José Camacho.
Esos posibles casos de riesgo forman parte de la población diana para la que el Sescam recomienda su vacunación. Este año hay una novedad, pues se incorporan a los niños entre seis meses y dos años que fueron prematuros, es decir, que nacieron antes de la semana 32. Camacho explicó que se ha constatado que se trata de un grupo vulnerable a las complicaciones que puede presentar la gripe.
El resto de población diana se mantiene. La Consejería de Sanidad tiene mucho interés en la población de mayores de 65 años, pues el año pasado solo se vacunó el 58,77%. Este 2019 quieren llegar al objetivo del 65% que ha marcado el Ministerio de Sanidad, aunque todavía queda trecho para llegar a la recomendación que hace la Organización Mundial de la Salud del 75%.
También se recomienda la vacunación a las embarazadas y a personas con diversas patologías:cardiovasculares, neurológicas, respiratorias, metabólicas, renales, hepáticas, hematológicas, trastornos de la coagulación, síndrome de Down, implante coclear, cáncer o inmunosupresión, entre otras. Además es fundamental que se vacunen los profesionales del ámbito social y sanitario que trabajan en recintos a los que acuden muchas personas mayores y con patologías. También se recomienda la vacunación a bomberos, policías y a ganaderos en contacto con aves y cerdos para evitar la interactuación de virus de gripes de animales y humanos.
Camacho calcula que el pico de incidencia de la gripe puede llegar a comienzos del año entrante. Recuerda que se trata de una enfermedad que puede afectar al 10% de la población. Y la vacunación es clave, puesto que si se contrae, solo se puede tratar de manera sintomática, con reposición de líquidos, reposo y analgésicos.
Cubrirse la boca y lavarse las manos. Además de la vacunación, hay otras recomendaciones para prevenir el contagio y la propagación. Es fundamental cubrirse la boca cuando se va a estornudar y toser con el brazo o un pañuelo, lavarse bien las manos cuando se ha usado el pañuelo y evitar llevarse la mano a boca y nariz si ha estado en contacto con elementos que pueden llevar el virus.
La directora general de Atención Primaria, Natalia Vallés, también recomendó a quienes tengan síntomas que eviten acudir a lugares donde haya mucha concentración de personas para evitar que el virus se extienda. Vallés expuso que en todo el mundo se producen al año de tres a cinco millones de casos graves por la gripe y que esta enfermedad causa 300.000 muertes cada temporada.