La localidad de Polán acogió el pasado domingo a casi 300 karatecas en el estreno de la Liga Interescolar Kidokan, destinada a los niños y niñas que practican kárate en los colegios que dirige el club toledano y que no llegan a competiciones regionales. Los participantes englabaron desde la categoría Infantil hasta 6º de Primaria.

Fue una fiesta del kárate con 270 escolares representando a 32 centros educativos de Toledo y varias localidades. Aunque todos están bajo el paraguas del Kidokan, en el polideportivo polaneco compitieron bajo la bandera de su colegio, lo que le dio una mayor espectacularidad a una cita que ha visto la luz gracias al acuerdo al que llegaron el director del club capitalino, Álvaro Jiménez, y el Ayuntamiento de la localidad.

Además, se ha contado con la aportación de varios patrocinadores, como Autos Illán o Juguettos, que regaló un balón a cada niño, y con la mano de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.

La gran fiesta del KidokanLa competición se dividió en Kata y Kumite. En esta última no hubo cinturón mínimo para participar y las categorías participantes fueron Alevín e Infantil, mientras que en Kata sí que se debía cumplir el requisito de no superar el cinturón verde. Esta modalidad se dividió en cursos escolares, Educación Infantil, 1º, 2º, 3º, 4º y 5º de Primaria, y Adultos. Consiguieron medalla el primero, el segundo, dos terceros y los cuatro finalistas, por lo que se premió a los ocho mejores de cada categoría. En cualquier caso, todos los participantes recibieron un diploma y una medalla de participación, por lo que se cuidaron todos los detalles. De hecho, a la entrega de medallas acudieron la campeona del Mundo y de Europa de para-kárate Isabel Fernández, que también forma parte del CD Kidokan, y María Espinosa.

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