Sandra Sánchez espera un duelo con Shimizu en Tokio

EFE
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Las finales entre la talaverana y la nipona se han convertido en un clásico:«Todo el mundo da por hecho que estaremos en esta final de los Juegos»

Sandra Sánchez con el embajador de Japón en España, Masashi Mizukami. - Foto: L. T.

Sandra Sánchez y Kiyou Shimizu han regalado a los aficionados un nuevo ‘clásico’ del deporte mundial: desde que comenzó el periodo puntuable para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, el 2 de julio de 2018, la española y la japonesa han disputado la final de kata de todos y cada uno de los torneos clasificatorios de kárate.

«Es la única categoría en la que se ha repetido la misma final en todos los torneos», destacó Sandra Sánchez, que cruza los dedos para que el ‘clásico’ se traslade hasta la competición más importante de todas, la olímpica.

«Todo el mundo da por hecho que estaremos en esa final de los Juegos. Pero queda mucho, hay que trabajar, ir paso a paso y cumplir», comentó Sánchez a Efe tras regresar de su última competición, la Premier League de Tokio, en el mismo escenario que albergará los Juegos, el mítico Nippon Budokan.

La igualdad entre ellas es tal que allí se produjo otro hecho insólito en la competición de kárate: ambas finalistas recibieron de los jueces la misma puntuación y tuvieron que ejecutar un kata de desempate. Puntúan siete jueces, entre cuyas notas se descartan las dos más altas y las dos más bajas. La parte técnica representa un 70  por ciento de la nota, la física un 30 por ciento. Incluso con todas estas variables, Sánchez y Shimizu igualaron a 27,68 puntos. Sin tiempo de pensarlo, presentaron un nuevo kata en el que la japonesa se impuso por un suspiro, 27,74 frente 27,48.

«Por un lado fue muy bonito el espectáculo que dio el empate, y ver cómo el pabellón animó. Más a ella, claro, pero a mí también. Pero me dejó con esa espinita del desempate, así que habrá que ir a por la revancha para ir preparando los Juegos», afirmó la karateca de Talavera, que se impuso a Shimizu en su enfrentamiento más importante hasta ahora, la final del Mundial del pasado noviembre en Madrid.

«Amarillo fosforito» es el color con el que Sandra Sánchez tiene marcado en su calendario ese 6 de agosto de 2020 en el que intentará proclamarse campeona olímpica.

Por otro lado, Sandra Sánchez fue una de las integrantes de la familia olímpica española que brindó con el embajador japonés en España, Masashi Mizukami, por el éxito organizativo y deportivo de los Juegos de Tokio 2020, durante una recepción en la residencia en Madrid del representante nipón.