Urbanismo desbloquea el PAU2 de Patrocinio con 24 hectáreas

Leticia G. Colao
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El Pleno ha aprobado el inicio del expediente para resolver esta actuación urbanizadora parada desde hace más de una década. Cuenta con la construcción de 1.600 viviendas y zonas verdes

Urbanismo desbloquea el PAU2 de Patrocinio con 24 hectáreas

La concejalía de Planificación Urbana y Accesibilidad se ha propuesto sacar del cajón diferentes proyectos urbanísticos parados desde hace años y darles salida con desarrollos industriales, terciarios o residenciales que beneficien el progreso económico de la ciudad. El concejal del área, José Antonio Carrillo, se ha caracterizado desde su llegada al equipo de Gobierno por ‘desempolvar’ proyectos completamente paralizados desde hace una o incluso dos legislaturas, siempre con el ánimo de otorgar suelo para la llegada de empresas y permitir a su vez el crecimiento urbanístico de Talavera.

El último en salir a la luz ha sido el Programa de Actuación Urbanizadora PAU 2 de Patrocinio, zona residencial al noroeste del barrio con 23,4 hectáreas. En el Pleno del pasado jueves, se aprobó el inicio del expediente para la resolución de esta actuación urbanizadora más de una década después de que se iniciase su tramitación.

Este PAU se ubica al norte de la calle San Antonio del barrio -siempre condicionada por este desarrollo urbanístico, ya que no se ha terminado de asfaltar ni dispone de la acera de un lado por lindar precisamente con este proyecto-, y un pequeño tramo de la avenida de Portugal así como un lateral del polígono Marifé. El plan urbanístico ‘arropa’ a Patrocinio por el norte, extendiéndose desde poco antes de su inicio -junto a la gasolinera de la carretera de Calera- hasta la parte trasera del área deportiva del barrio, junto a la piscina y el campo municipal ‘Jesús Fraile Chuchi’.

El plan del PAU2 afectará a un total de 23,4 hectáreas de terreno en las que se construirán un máximo de 1.598 viviendas en edificios de cinco plantas, además de amplias zonas verdes y un gran bulevar.

Esta zona de la ciudad cuenta con suelo urbano de carácter residencial plurifamiliar, compatible con terciario y comercial. La densidad máxima de viviendas es de 65 por hectárea.

desde 2005. El Ayuntamiento debe resolver la situación en un proyecto que, aprobado en 2005, no ha dejado de ser polémico, especialmente en sus primeros años de desarrollo. El también conocido como PAU-Parque Oeste cuenta con unos 70 propietarios, conocidos como Agrupación de Interés Urbanístico o agente urbanizador, constituido al efecto de realizar las obras del sector. Este grupo llegó a firmar convenio con el Ayuntamiento, incluso se tramitó y aprobó un proyecto de reparcelación por el que se transforman las originales fincas agrícolas que existen en el ámbito en rústico, a las fincas que finalmente resultan aptas para la adjudicación, con solares, calles y zonas verdes, explica el concejal del área.

Este proyecto de reparcelación, sin embargo, no llegó a inscribirse en el registro de la propiedad y 15 años después, el plan urbanístico sigue intacto. En parte, porque «hay solicitudes de esta agrupación, en los años 2013, 2014, 2016 y 2018, tanto para resolver el programa de actuación urbanizadora para dejarlo sin efecto como para suspenderlo». En todas las ocasiones, indica Carrillo, «se desestimaron por parte del Ayuntamiento o bien incluso alguna ni se llegó a resolver».

Devolver este tema al Pleno supone iniciar los trámites para resolver el PAU, es decir, iniciar un procedimiento en el que se saca a información pública y se da audiencia a todas las partes implicadas para su resolución. La audiencia se da tanto al agente urbanizador, en este caso la agrupación de propietarios, como a los propietarios de forma individual y a la entidad que en su día avaló o garantizó parte de las obras de urbanización.

Con lo que resulte, nuevamente el Pleno y con los informes previos de la Comisión Regional de Ordenación del Territorio y Urbanismo y en su caso incluso con el del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha, se procederá a la resolución del PAU. Esto significa, detalla Carrillo, que si bien es posible que la ordenación urbanística, los planos y el plan parcial mantengan su vigencia, la adjudicación de la condición de urbanizador de la agrupación de interés urbanístico, se quitaría.

Y no solo porque ya se ha solicitado por su parte en numerosas ocasiones, sino porque se ha superado en mucho el plazo legal establecido para realizar las obras, cinco años desde su adjudicación, que fue en 2005.

Si esto fuera así, el Ayuntamiento tendría que declarar el incumplimiento del urbanizador, por lo que podría proceder a la incautación de la garantía que prestó en su día o, simplemente resolvería el PAU. En este caso, afectaría al agente urbanizador pero no a la ordenación urbanística ya realizada.

Tras esto, el Ayuntamiento «puede o bien por sus propios medios, lo cual es inusual, o bien por parte de un tercero, proceder a ejecutar las obras», indica Carrillo, aunque lo habitual es que se vuelva a licitar la ejecución de las obras del PAU y que cualquier tercero, ya sean empresas o propietarios, concurra para ser nuevo agente urbanizador.

pau dividido en varios sectores. Dada la extensión del PAU y las nuevas circunstancias económicas, diferentes a las de 2005, lo normal sería que el sector se dividiera ahora en otros más pequeños para facilitar su ejecución por fases, defiende el concejal de Planificación Urbana. Esta fragmentación de sectores amplios no es extraña en Talavera, ya que algunas de las actuaciones urbanísticas movidas en los últimos tiempos, entre ellas Injertillos o el Tajo (junto a Los Alfares), ya siguen esta técnica. Ambos se ubican en ámbitos más grandes pero ejecutar una primera fase es mucho más asequible y conveniente «no solo a efectos económicos sino también para hacerlo más rápido, para poner en el mercado y poder hacer rentable y viable esta actuación urbanizadora».