Exigente feria taurina en Castillo de Bayuela

Dominguín
-

Sólo se cortó una oreja en la primera novillada, que fue a manos de 'El Primi0, a un bravo novillo de La Laguna premiado con la vuelta al ruedo

Exigente feria taurina en Castillo de Bayuela

La tradicional feria taurina de Castillo de Bayuela ha sido todo un éxito en cuanto a asistencia. Aprovechando que este año las fiestas caían alrededor del fin de semana, la gente acudió en masa y llenó las calles y su plaza. Cuatro encierros que fueron un reclamo en toda la comarca, especialmente el nocturno del día 6, donde las vacas hicieron las delicias de los participantes. Los encierros de las reses que se iban a lidiar por la tarde se desarrollaron de manera adecuada, sin registrarse heridos y con una organización que lo llevo a cabo a la perfección.

La única oreja de la tarde se cortó en la primera novillada, donde Primitivo López “El Primi”, se enfrentó a dos novillos de “La Laguna”. Precisamente el segundo de la tarde fue bravo, repetidor, embistiendo siempre por bajo, destacando su excelente pitón izquierdo. Se le premió con la vuelta al ruedo. “El Primi” estuvo dispuesto y agrado al exigente público de la localidad serrana, destacando las tandas de naturales al novillo que le cortó el trofeo.

El día siguiente los novillos de Piedraescrita defraudaron, y echaron por traste las ilusiones puestas en este festejo. Fernando Flores, pese a intentarlo no tuvo la suerte de su lado y no le quedó más que justificarse ante el respetable. Era muy esperado el novillero de Cedillo del Condado David Campos, torero de personalidad y de toreo puro que solo pudo esbozar algunos muletazos de gusto y torería. Campos era todo disposición, pero teniendo delante la pobre colaboración de los erales, todo quedó en dejar una buena impresión en su paso por Castillo de Bayuela.

Borja escudero era el encargado de estoquear la segunda novillada de “La Laguna”, pero no salió como la primera lidiada. Los novillos echaron por tierra las ilusiones del novel que tuvo detalles toreros y se quiso implicar desde el principio de la faena con el público.

La gente además de responder en los encierros, llenó los tres días de toros su particular plaza de palos que es de los pocos cosos de la provincia que siguen manteniendo esta tradició