La organización de ayuda a la infancia se ha adaptado a la nueva realidad variando sus procedimientos con el objetivo de garantizar el bienestar físico y emocional de los 473 niños, niñas y jóvenes a los que acompaña en Castilla-La Mancha. Por ello, la llegada del coronavirus ha propiciado la suspensión de la presencia física de los niños y sus familias en algunos los programas, por lo que Aldeas ha habilitado «ayudas de urgencia para las familias más vulnerables» que garanticen la cobertura de sus necesidades básicas de alimentación, higiene y salud.

No en vano, en la región se ofertan diferentes programas de prevención destinados a prestar apoyo a las familias en situación de vulnerabilidad para que puedan mejorar sus condiciones de vida y cuidar mejor de sus hijos. A través de ellos, la organización atiende a 201 niños y niñas que ahora se ven irremediablemente afectados por la crisis y por las medidas de confinamiento.

En este punto, Laura Prados explicó algunas de las medidas tomadas por Aldeas Infantiles SOS, aunque no olvidó recordar que desde la organización se está apelando a la solidaridad colectiva y a la necesidad urgente «de contar con recursos económicos necesarios para hacer frente a las nuevas situaciones de dificultad por las que están atravesando los niños y las familias más vulnerables».

Sobre el resto de medidas aplicadas, se ha establecido que los educadores y demás profesionales «mantienen contactos telefónicos permanentes o videollamadas» con los niños y sus familias para asegurar su bienestar en el hogar, «con seguimiento de las tareas escolares, propuesta de actividades para niños y familias, y refuerzo de pautas educativas». Todo ello con el objetivo de facilitar herramientas para que los niños vivan esta situación en un ambiente familiar positivo y con la mayor normalidad posible. Si fuese necesario, la organización también realizaría intervenciones directas en el ámbito familiar.

Se ha reforzado la política de protección infantil y se han habilitado canales para que los niños puedan llamar y compartir con los profesionales sus inquietudes y preocupaciones en caso de necesidad. En este mismo sentido, la organización sigue atendiendo de manera presencial y en remoto todas las intervenciones psicológicas y terapéuticas que no se pueden posponer.

Desde Aldeas Infantiles SOS, quieren mostrar la gran preocupación por estas familias, por ello pone de manifiesto «la necesidad de adoptar medidas urgentes que les permitan afrontar esta situación sin poner en riesgo el bienestar y la protección de sus hijos». De hecho,  están priorizando el cuidado de la salud mental de los niños y jóvenes, ya que el aislamiento puede producir cuadros de estrés y fuertes contrastes emocionales.

Ayuda a la infancia desde 1967. Aldeas Infantiles SOS, presente en España desde 1967, es una organización internacional, privada, de ayuda a la infancia, sin ánimo de lucro, interconfesional e independiente de toda orientación política. Se fundó en 1949 en Imst (Austria) y hoy está presente en 136 países. En 2016 fue galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia.

Su misión es atender a niños y jóvenes que se encuentran en situación de vulnerabilidad, impulsando su desarrollo y autonomía mediante el acogimiento en entornos familiares protectores y el fortalecimiento de sus redes familiares, sociales y comunitarias. Trabaja para fortalecer a las familias vulnerables, de modo que puedan atender adecuadamente a sus hijos; protege a los niños que se han visto privados del cuidado parental, a los que brinda un entorno familiar protector en el que puedan crecer sintiéndose queridos y respetados, y acompaña a los jóvenes en su proceso de maduración e independencia.