La fortaleza olvidada del Castillo de Ciruela

Hilario L Muñoz
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Los vecinos del paraje de Ciruela solicitan a la Junta de Comunidades que el castillo de la zona sea declarado Bien de Interés Cultural para facilitar la conservación de sus restos

La fortaleza olvidada del Castillo de Ciruela - Foto: Rueda Villaverde

La calle Ciruela de Ciudad Real hace referencia a la aldea de Ciruela, un paraje situado a unos 12 kilómetros del centro de la capital. Su relevancia fue tal que aparece en la Carta Puebla como uno de los territorios que se integraron en Villa Real como Villar del Pozo o Poblete. Allí había una aldea ubicada a los pies de un castillo, al que ahora sus vecinos quieren proteger mediante la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC).  

La asociación de vecinos del paraje, presidida por Marcial González, ha iniciado el proceso cursando una petición a la Junta de Comunidades, en la que se incluye un informe arqueológico, para proteger las ruinas que quedan, parte del Torreón, ubicado sobre un domo volcánico, y parte de la antigua iglesia Santa Marina, de la que solo se conserva las columnas que sostenían un arco y la planta. Además de tener un objetivo de protección, está también la intención de provocar el interés por excavar la zona, cuando haya recursos económicos, en la búsqueda de los restos de la antigua fortaleza y que puedan quedar en el subsuelo.

«Se trata de dar a conocer el valor histórico» que tiene el espacio que ocupa Ciruela, explica González vinculado a la aldea desde joven. Sus padres compraron una casa en el paraje cuando tenía 14 años y cuenta con una vivienda también en la zona donde hay once casas habitadas, sobre todo los fines de semana.«Todo lo que esté declarado BIC tiene unas salvaguardas de patrimonio, nadie puede edificar nada ni tocarlo», explicó el presidente de la asociación vecinal, quien recordó que el terreno está «virgen», nunca se ha analizado desde el punto de vista arqueológico y señala el terreno que puede abarcar la fortaleza, al menos que discurre del torreón a la iglesia y la propia aldea, situada a los pies del castillo. La petición es, para Marcial, «casi una cuestión de romanticismo, que el castillo se reconozca», indicó y que se sepa de la trascendencia que tuvo. Hay que tener en cuenta que el castillo conformaba un triángulo estratégico con el de Caracuel y Alarcos, que se pueden ver en días claros desde el castillo de Ciruela. No era principal, sino que apoyaba la vigilancia del Sur, durante el siglo XIII.

La fortaleza olvidada del Castillo de CiruelaLa fortaleza olvidada del Castillo de Ciruela - Foto: Rueda VillaverdeEntre los habitantes de este paraje en pleno siglo XXI se encuentra Francisco Fernández. Vive allí todo el año y defiende que la protección del castillo es clave para evitar que se vayan «piezas». Recientemente se denunció la desaparición de una piedra de molino. «La vida es tranquila aquí», asegura este vecino que algunas veces hace de guía y arregla, poco a poco, la aldea de Ciruela, donde hay una plaza con un pozo y una mesa de madera construida por los vecinos en unos árboles.

El presidente de la asociación recuerda que más allá de la declaración de BIC es necesario señalizar el espacio, para que los muchos visitantes que hay conozcan lo que están viendo y cómo pueden subir a verlo, así como algunas normas básicas.  A este aspecto se apunta desde la propiedad de la finca donde se ubica el castillo que, poco a poco, el paraje se conoce más y el suelo que cultiva, a los pies de la montaña, y que la zona no se respeta por quienes pasean, dejan basura o van con perros sueltos. «Es un coto de caza», explican a La Tribuna y la llegada de turistas le afecta económicamente también en ese sentido, al no poder emplear los alrededores. A esto, los actuales propietarios añaden la posibilidad de que le pueda ocurrir algo a un visitante en su terreno y reclama que al visitar la zona se recuerde que el castillo está en una propiedad privada y que al estudiarse la posibilidad de declarar BIC se le tenga en cuenta.

«Para nosotros sería interesante que se declarase», explicó el concejal de Cultura, Ignacio Sánchez, quien expuso que van a iniciar conversaciones con la Junta y los propietarios para ver posibles actuaciones. De hecho, señaló que desde el servicio municipal se está analizando la propuesta para acudir a la Junta de Comunidades para formalizar la declaración de esta parte de la historia de Ciudad Real.