Los Ribereños advertirán mañana a la Comisión del Trasvase que los embalses de cabecera corren el riesgo de caer al nivel cuatro este verano. Y además avisan de que en el Levante no se está usando el agua de los últimos trasvases porque no hace falta.

Esta advertencia la hará la Mancomunidad de Aguas de Municipios Colindantes de los Embalses de Entrepeñas y Buendía, que acudirá a la sesión de febrero de la Comisión de Explotación del Trasvase. Con los datos sobre la mesa, señalan que las cuantiosas lluvias que se han dado este año en el Levante hacen innecesario e irresponsable un nuevo trasvase. Apuntan que en los últimos cuatro meses no se ha enviado ni una gota de agua a pesar de tener aprobados varios trasvases. Aunque ha sido así porque el canal estaba cerrado por mantenimiento y reparación de averías, los Ribereños concluyen que esto demuestra que no les ha hecho falta.

«No hay necesidad actualmente de agua del Tajo en el Segura, no es una opinión, son datos», apostillan. Recuerdan que los trasvases aprobados en los últimos meses han sido ‘de papel’ es decir, aprobados en el Ministerio sin que luego hayan sido ejecutados.

Por eso, los ribereños propondrán que durante esta primavera no se apruebe ningún trasvase, para que, en caso de que se vayan llevando el agua de los trasvases ya aprobados, se pueda, por lo menos, llegar al verano con una lámina media en Entrepeñas que permita su aprovechamiento como garantiza la ley, por encima de otros usos.

Por otro lado, la mancomunidad volverá a solicitar una auditoria sobre el agua exacta del Tajo que hay trasvasada en los embalses del Segura y en las «opacas balsas de riego». «Curiosamente, tras señalar que su propia web indicaba que había cerca de 150 hectómetros cúbicos de agua del Tajo almacenados en su cuenca, la Confederación Hidrográfica del Segura ha quitado esos datos y ya no son públicos», critican.

El PP y el PSOE no ven el vaso igual de lleno. Los dos principales partidos de Castilla-La Mancha, PP y PSOE, volvieron a demostrar esta mañana que aunque estén sentados en la misma Mesa del Agua, no pierden la oportunidad para enfrentarse por este tema. La diputada del PP Ana Guarinos apuntó que «el Gobierno de España ya ha dicho que diga lo que diga la Mesa del Agua, en este país se va a hacer lo que diga el PSOE». Se refirió así a las declaraciones del delegado del Gobierno en la región, Francisco Tierraseca, que no ve el trasvase cero en el horizonte y plantea soluciones intermedias.

Sin embargo la eurodiputada del PSOE, Cristina Maestre, avisa de que «el fin del trasvase es inexorable, va a ocurrir más tarde o más temprano».