La rampa de Río Tiétar se iniciará esta legislatura

J. Monroy
-

El proyecto ya cuenta con retención de crédito y ha pasado a Fiscalización. Cuando tenga el visto bueno de Contratación, saldrá un concurso 'superreducido' que se decidirá en diez días

La rampa de Río Tiétar se iniciará esta legislatura - Foto: VÁ­ctor Ballesteros

Ha sido uno de los culebrones de la legislatura, pero parece que al final tendrá final feliz para cientos de vecinos. Porque la legislatura va a concluir con las obras de la rampa entre las calles Río Tiétar y Río Guadarrama del Polígono no solo encarriladas, sino iniciadas. De esta forma, se cumple la voluntad de los vecinos del barrio, que votaron en masa por este proyecto en los I Presupuestos Participativos de Toledo, hasta convertirla en el más apoyado.

Tras la elección de esta rampa entre todos los proyectos elegidos, explica la edil de Participación Ciudadana, Helena Galán, pasó a la Concejalía de Obras. Ahora está muy cerca de culminar. Esta semana se ha aprobado la retención de crédito de la actuación, y ha pasado a Fiscalización, antes de ir a Contratación. Ahora que la obra salga a concurso depende del informe de Contratación, que Galán espera que no tarde demasiado. Después se desarrollará un concurso ‘superreducido’, que se tendrá que adjudicar en diez días. La edil entiende que la obra, si todo va bien, tendrá que comenzar antes de las elecciones. Se puede adjudicar el día 16. En cualquier caso, tiene que iniciarse, seguro, antes del fin de esta legislatura, el próximo 14 de junio.

Obra complicada. El problema con el que se ha encontrado esta obra, explica Galán, es que al final no se podía desarrollar como venía recogida en la propuesta de la Asociación de Vecinos El Tajo, porque la rampa en las actuales escaleras no tendría la pendiente legal. Ha habido que reformar el proyecto, y hacerlo ateniéndose al presupuesto aprobado de 75.000 euros.

De forma que será una rampa en dos tramos, con un descansillo en medio. Sale junto a la escalera, para volver a su lado al final. De esta forma, apunta Galán, no se pierde ninguna plaza de aparcamiento, lo que parece que era un problema argumentado por algunos vecinos del entorno para pedir al Ayuntamiento que no se desarrollara. Como mucho, apunta la concejal, habría que reordenarlas. Aunque lo que no se va a poder hacer es aparcar en la curva, algo que tampoco ahora se puede hacer legalmente.

A la hora de desarrollar el proyecto, los técnicos ya han revisado el talud. No será necesario asegurarlo, aunque sí será necesario un doble muro de contención, de ahí que la obra en principio se fuera de precio. Hay que quitar los ladrillos actuales, apuntalar el muro, hacer el doble muro y después la rampa.