Simplemente es poner negro sobre blanco un procedimiento que ya se viene desarrollando en el municipo de Camuñas. Así lo certificaba la alcaldesa, María del Carmen Cano, al hablar de la ordenanza reguladora de participación ciudadana del Ayuntamiento de Camuñas que recientemente ha salido a información pública para que se puedan presentar las alegaciones oportunas.

Cano apunta que el objetivo del Ayuntamiento es «canalizar las inquietudes de los vecinos y vecinas de Camuñas a cerca de los temas municipales; que nos puedan transmitir ideas, propuestas, sugerencias, inquietudes e incluso críticas».

Eso sí, matiza la regidora municipal que «no deja de ser algo que ya se venía haciendo»y que ahora, en forma de ordenanza, se le otorga una forma «reglada».

Cuando la ordenanza esté aprbodada de forma definitiva, la primera acción, avanza la alcaldesa, será convocar a las asociaciones a la celebración de una asamblea general.

De esta asamblea, en la que no se excluye la participación de particulares, matiza María del Carmen Cano, saldrán las primeras líneas de trabajo y hasta un calendario de reuniones para ir fijando el programa de actuación. «Será un encuentro para exponer lo que queremos hacer y lo lógico es que los asistentes ya puedan opinar», indica la alcaldesa que añade que el reglamento de funcionamiento no será un documento cerrado sino permeable y abierto, precisamente, haciendo honor al nombre que lo bautiza: la participación.

«Será dar un buen ejemplo del nivel de implicación y participación que los vecinos quieren tener», sentencia María del Carmen Cano.

Por otra parte, la Ordenanza también establece una división por áreas, de modo que se producirán reuniones con colectivos relacionados con el deporte, con la cultura, con el bienestar social o con el turismo y el comercio, por ejemplo.

Recuerda la regidora de Camuñas que generalmente se realiza una o dos reuniones al año con las agrupaciones y asociaciones locales sin distinción de áreas. Ahora bien, como «afortunadamente hay un movimiento asociativo tan rico en el pueblo, hay suficientes razones como para establecer reuniones específicas por áreas» que será una de las novedades que introduzca la ordenanza en relación a la práctica que se viene desarrollando en Camuñas en materia de participación ciudadana.

El Ayuntamiento cede el ‘Almacén de Trigo’ para fiestas, citas musicales y propuestas de ocio

La cercanía del Ayuntamiento de Camuñas con sus vecinos no espera a que haya un reglamento de participación ciudadana para ofrecer propuestas que beneficien a la localidad. Así las cosas, ha decidido, buscando dinamizar la actividad en el municipio, generar oportunidades de ocio y también de empleo, poner a disposición de los bares y negocios de ocio de la localidad el espacio municipal conocido como ‘Almacén del Trigo’ para que puedan organizar eventos o celebraciones.   

 En algunas ocasiones, señala María del Carmen Cano, el Ayuntamiento ha sabido que por falta de espacio algunos negocios no han desarrollado ciertas citas musicales o de ocio. «Pues ahora, y cumpliendo eso sí estrictamente las condiciones, tienen un espacio en el que poder desarrollar estas propuestas», indica la alcaldesa, que añade que «si ellos consiguen atraer público que les genere unos ingresos no cerrarán el negocio y seguirán teniendo gente a la que le dan empleo y seguirán consumiendo en el propio pueblo».

 «Estamos teniendo iniciativas de dinamización con comercios y negocios locales y unas funcionan y otras no, pero por probar que no quede», indica Cano que insiste en que esta medida busca potenciar el consumo dentro del pueblo y el ocio.

El ‘Almacén de Trigo’ es un edificio municipal situado a las afueras del casco urbano que  es utilizado además de para citas que organiza el Ayuntamiento -como el próximo baile de Caraval-, reuniones de organizaciones benéficas o culturales.

Los negocios interesados en poder hacer uso de este espacio, ya hay una solicitud para una fiesta con Dj’s, confirmaba la alcaldesa, pueden poner o no precio a la entrada pero han de solicitar con antelación el uso del espacio para cercionarse de que está disponible.

Entre los requisitos a cumplir, la empresa que organice un acto deberá contratar un seguro de Responsabilidad Civil, respetar el aforo máximo de 300 personas, cumplir con el horario de apertura y cierre que pueda establecer el Ayuntamiento y limpiar y acondicionar el local una vez terminado el evento, así como asumir todos los gastos que conlleve la actividad.