La nieve, convertida ya en hielo, sigue todavía presente en calles y aceras de municipios como Madrid o Toledo, cinco días después de que cesaran las fuertes nevadas que ha arrastrado la borrasca Filomena en el centro peninsular. Municipios en los que arrecian las críticas por la actuación de las administraciones públicas y los elogios por la participación vecinal en los trabajos.

En Talavera mientras tanto apenas se han visto unos débiles copos de nieve, pero la ordenanza municipal de limpieza viaria, estética e higiene urbana deja claro a quien correspondería quitarla. Aunque es poco frecuente que nieve sobre la ciudad, la citada ordenanza recoge con bastante detalle que es a los propietarios de las fincas, es decir, a los vecinos, a quienes corresponde retirar la nieve acumulada. La ordenanza establece que «en caso de nevada u otro fenómeno meteorológico extremo, como fuertes lluvias, avalanchas de agua, acumulación de fango o barro» la retirada de la vía pública correspondiente a cada fachada correrá a cargo de los titulares de los inmuebles y en general todos los vecinos y se hará de forma que quede libre el espacio suficiente para el paso de los viandantes.

De la misma forma, la ordenanza especifica que la nieve acumulada se retirará de tal forma que no se deposite sobre los vehículos estacionados, no impida la circulación del agua hacia las alcantarillas ni de los coches, queden libres los accesos a las alcantarillas de la red de saneamiento y se permita la circulación de personas y vehículos.

La sal, sin embargo, debe ser repartida por el Ayuntamiento, según esta normativa. El incumplimiento de estas obligaciones se considera una infracción grave de la ordenanza municipal.

Coincidiendo con la ola de frío, el Ayuntamiento ha recordado además en Twitter que no se puede arrojar agua a la calle, por ejemplo procedente de las tareas de limpieza de inmuebles o portales. Con las bajas temperaturas el agua se acaba convirtiendo en hielo, con el riesgo que ello conlleva para los viandantes. En este caso, se establecen multas de 30 a 60 euros.

La ciudad vuelve a registrar 6,2 grados bajo cero

Talavera ha vuelto a registrar temperaturas gélidas. La mínima de ayer superó de nuevo los 6 grados bajo cero y se situó en los mismos niveles que este martes, cuando comenzó la ola de frío más intensa, con  6,2 grados negativos. La temperatura cayó por debajo de las previsiones y fue levemente más alta que la del miércoles, cuando la mínima registrada en la ciudad fue de -7,4 grados.

La Agencia Estatal de Meteorología tenía previsto volver a activar anoche la alerta naranja por frío en las provincias de Toledo, Guadalajara y Cuenca, ante la posibilidad de que se alcancen de nuevo los -12 grados en las zonas de montaña del nordeste y -10 en Toledo y Cuenca.

En Talavera las predicciones apuntan a que estas bajas temperaturas se extenderá todavía en las jornadas de hoy y mañana. AEMET prevé temperaturas mínimas de cinco grados bajo cero en ambas jornadas. En Toledo capital se esperan hoy mínimas de seis grados bajo cero.