Julio Cidoncha resultó el protagonista indiscutible del choque del domingo ante el Recreativo Granada en El Prado por ese gol de la victoria, que suponía el definitivo 3-2, marcado en el 93 en la que fue la última jugada. En declaraciones a este periódico, el centrocampista ha señalado sobre el tanto que «cuando la di, no sabía ni adonde iba porque había muchos rivales delante y no vi ni como entraba». Pero cuando comprobó que el balón se había colado en la portería, «una locura con los compañeros del banquillo, el esprint que se pegaron»; en definitiva, «una pasada». Parece que todavía tardó unos segundos en asimilar su gesta porque «cuando me estaban abrazando, ni me lo creía».

Fue una victoria, como se suele decir, sobre la bocina lo que a su juicio significa que «el destino nos tenía guardado ganar así el domingo y nada mejor que hacerlo en el último segundo».

A partir de ahí, Cidoncha no ha parado de recibir felicitaciones, muchas de ellas de los aficionados blanquiazules:«Es síntoma de que estás haciendo bien las cosas y trabajando;demuestra que la afición está con nosotros y el domingo se vio cuando nos animaron en los peores momentos». Este triunfo es, por supuesto, colectivo:«Quitando el gol, que es lo de menos, lo importante eran los tres puntos, da igual quien marcara el gol, ni cuando».

Pero, aun así, parece que los planetas se alinearon para que, en el día de la Patrona de Talavera y en la portería de la Virgen del Prado, marcara en el último segundo el gol de la victoria un jugador muy vinculado a esta comarca, ya que «mi madre es de Herreruela». Además, en la grada, «vinieron muchos amigos a verme, justo el día, y la verdad es que todo fue increíble».

En definitiva, una victoria vital para los blanquiazules, no solo por los tres puntos, sino por la confianza y la moral de todo el plantel de cara a la próximas jornadas:«Lo más importante era quitarnos de la cabeza ganar el primer partido; nos hacía mucha falta para demostrarnos psicológicamente que somos capaces pero que, por unas cosas o por otras, no acabas ganando;entonces, el domingo había que ganar como fuera y resultó así, lo que demuestra la dificultad de esta categoría».

Este encuentro ante el filial del Granada tuvo continuas alternativas en el marcador: primero se adelantó el CF Talavera con el gol de Samu Corral, después remontó el rival, igualó Oca para culminar Cidoncha con el 3-2: «En la primera parte hicimos las cosas muy bien, nos pusimos por delante y al final te meten un gol de media llegada en un pelotazo de segunda jugada y me acuerdo, además, que no defiendo yo bien». La conclusión es que el encuentro llegó al descanso y «cuando debíamos ir 2-0 ó 3-0, vamos empate y nada más empezar la segunda te marcan el segundo». A partir de ahí, «aguantamos el arreón de ellos, volvimos después a coger el mando del juego y con el 2-2 la verdad es que no volvimos locos porque demostramos que queríamos ganar». En este punto, Cidoncha reconoce que «a veces, hay que tener un poquito más de cabeza y no tanto corazón». A este respecto apunta que «debimos controlar más los tiempos del partido porque sabíamos que ocasiones íbamos a tener».

El mediocentro coincide con su entrenador, Fran Alcoy, en la necesidad de mantener la concentración durante todo el partido: «Lo más importante en esta categoría es la concentración y cuidar todos los detalles.

Y el sábado visita a Villarrubia (20,00 horas) en el derbi regional. Del adversario, indica que «sobre todo en su casa, va a ser un rival muy duro». Pero Cidoncha pone de relieve que en el Talavera son conscientes de que «tenemos muy buen grupo y creo que la fuerza la tenemos ya en conjunto; tenemos que ir allí a competir y, sobre todo, sabiendo ya que somos capaces de ganar donde sea».