El Ayuntamiento de Toledo ha redactado un total de 23 alegaciones al borrador del proyecto de Plan Hidrológico del Tajo. Contaminación, vertidos, caudales, paisajes, erradicación de especies exóticas o revegetación de riberas al paso del río por el término municipal son algunas de las propuestas que se lanzan desde el Consistorio. Son cuestiones lógicas y evidentes, muchas de ellas reclamaciones históricas sobre el río, pero entre las que sorprende una que afecta directamente con el consumo de agua de la ciudad.

Y es que, la primera alegación que se realiza desde la capital de Castilla-La Mancha va contra una dotación «insuficiente» de agua para Toledo. El borrador del Plan Hidrológico del Tajo no deja, en opinión del Ayuntamiento, «opción a futuros desarrollos» de la ciudad, por lo que en su opinión deberían mantenerse, al menos, «la dotación actual, considerando demandas consolidadas las ya establecidas en el plan vigente».

El borrador del Plan plantea aspectos relacionados con el ciclo urbano del agua, algo vital para poder satisfacer las necesidades de la población y otros usos, como industriales o de servicio.

La propuesta del borrador para uso urbano en la localidad de Toledo se sitúa en 8,67 hm3 (8.670 millones de litros) al año, una cifra muy por debajo de los actuales 11,31 hm3/año, que supone un descenso del 23% del agua para uso urbano.

Los autores del borrador del nuevo Plan Hidrológico del Tajo alegan que se han basado en «datos reales de consumo» para proceder a fijar ese consumo de agua anual en 8,67 hm3 al año.

De esta forma, señalan que el consumo de agua por parte de la población permanente corresponde a más de la mitad de esa cifra (4,68 hm3), mientras que el consumo de la población temporal se situaría en 0,22 hm3. La hostelería, señalan en el borrador, se lleva 0,13 hm3, mientras que los servicios municipales consumen 0,41 hm3, la industria de la capital 0.87 hm3.

Por último, el uso terciario se cifra en Toledo en 1,03 hm3 y las pérdidas de agua de la red en 1,30 hm3, para dar una suma total de los ya comentados 8,67 hm3 (decimal arriba o abajo) en los que el nuevo Plan quiere dejar a la ciudad castellana.

Con todo, el Ayuntamiento no comparte esa 'realidad' que se señala en el borrador del Plan, ya que ellos tienen otros datos, como el que fija que en 2019 la ciudad consumió un total de 9,26 hm3, cifra ya bastante superior a la que se marca en el borrador del Plan Hidrológico del Tajo (PHT).

Además, desde el Consistorio toledano recuerdan a los autores del PHT que las demandas urbanas de los municipios cercanos de Polán y Guadamur se incluyen dentro de la unidad de demanda para otros usos (UDU) de Toledo. Juntas, esas localidades consumen más de 0,7 hm3 al año del agua asignada para la capital.

Otro de los aspectos que hacen que el Gobierno toledano alegue contra el PHT es que se estiman un nivel de pérdidas de agua muy elevado, puesto que consideran que «incluye agua no contabilizada».

También, desde el Ayuntamiento alertan que para la elaboración del consumo de población permanente se haya tenido en cuenta un valor de referencia de unos 250 litros de agua por habitante y día, pero aunque esa cantidad sea correspondiente a los 4,68 hm3 al año, no tiene en cuenta la población flotante de la ciudad ni la enorme masa de turistas que acuden a Toledo.

Así, con tres millones de visitantes al año, esa estimación pierde cualquier atisbo de realidad.

Por todo ello, y teniendo en cuenta que la normativa de Planificación Hidrológica, que hace referencia a que se deben considerar los datos de suministros de los últimos años, desde el Ayuntamiento de Toledo estiman en su alegación que los derechos concesionales de la ciudad ascienden a 400 litros por segundo, entre los embalses de Torcón y Guajaraz, es decir, 12,61 hm3 al año. Muy superior a la rebaja del 23% que plantea el borrador del Plan.

«La dotación actual se ajusta a este derecho ya reconocido», afirma el Consistorio en su escrito de alegaciones, para finalizar que esa dotación de agua «es compatible con la consecución de un buen estado ecológico para el río y las masas de agua que afectan a este municipio».