El Administrador Apostólico de la Archidiócesis, monseñor Braulio Rodríguez Plaza, se despedirá mañana de todos los diocesanos con la celebración de la Santa Misa en la Catedral Primada, en Toledo.
Rodríguez ha querido despedirse de una manera especial de los sacerdotes. Lo hizo primero con la vida religiosa, el pasado 2 de febrero, y después de encontrarse con las Vicarías de Toledo, la Sagra y La Mancha, también lo ha hecho con la de Talavera, ayer día 20.
Después de presidir el funeral de Julio Muñoz Cuesta, acudió a la casa sacerdotal ‘Beato Saturnino Ortega’ para el encuentro fraterno que comenzó con el rezo de la Hora Intermedia para, a continuación, tener un momento de ‘Lectio Divina’, que dirigió el arzobispo y oración.
Luego en el salón de actos, los arciprestes tomaron la palabra, antes lo había hecho el vicario episcopal de Talavera, Felipe García, para agradecerle «todos los años de entrega». Concluyó todo con una comida fraternal.