Consolidar el muro es el objetivo principal del proyecto para la restauración de la zona del recinto amurallado situada en torno a la iglesia de El Salvador, pero el proyecto permitirá también ofrecer una nueva perspectiva de uno de los más significativos enclaves del patrimonio talaverano e, incluso, del propio casco antiguo de Talavera. El proyecto se tramitaba por trámite de urgencia el pasado mes de diciembre y ha salido a licitación en 1,2 millones de euros, una cantidad que se obtendrá en su mayor parte  de los fondos del programa operativo Feder, a través de la Iniciativa Territorial Integrada (ITI) .

Aunque los términos exactos del proyecto que se va a ejecutar se definirán a través del propio proceso, la intención es primero consolidar y restaurar el lienzo y, de paso, recuperar la ronda de muralla, de forma que el recorrido superior de este tramo quede abierto. Para ello, se recobrará el adarve con tramos de puente metálico y con la apertura de un acceso desde la torre albarrana, una intervención vistosa que forma parte del proyecto inicial. 

El acceso a la torre se realizará desde El Salvador y permitirá habilitar, una vez cumplida la restauración, un mirador urbano en un punto sin duda privilegiado por su altura en pleno centro histórico de la ciudad. Los 14 metros de altura del muro, con cuatro metros de espesor, así lo garantizarán. 

El proyecto básico de consolidación del adarve de El Salvador, elaborado por el arquitecto municipal, Gonzalo Bauluz, plantea como premisas de la intervención el acondicionamiento de los paramentos interiores y exteriores del muro y las torres; la impermeabilización y drenaje de la cabeza del muro y adarves de la torre albarrana; y el tratamiento de las partes altas de la muralla, justo a la consolidación, limpieza y restauración arqueológica, la reposición de morteros y fábricas, previo estudio de composición de materiales y aparejos.

La muralla ofrece problemas como la presencia de grietas y fisuras, la pérdida de material o los residuos que han dejado sobre los lienzos la demolición de las construcciones adosadas a los mismos que se ha ido acometiendo durante las últimas décadas. Eliminar estas patologías es el principal objetivo de una intervención que se espera rentabilizar en el plano turístico. Ese es uno de los resultados que se esperan a corto, medio y largo plazo, de forma que se consiga de inmediato duplicar el número de visitas guiadas a la muralla e incidir, ya a medio plazo, en un incremento del 50 por ciento del número de las pernoctaciones turísticas, tal y como recoge el proyecto municipal. A largo plazo, se espera que estas acciones fortalezcan el prestigio cultural de Talavera y multipliquen su atracción turística, con el consiguiente desarrollo económico a través del sector turístico, hostelero, artesano y comercial.

el tiempo apremia. El plazo de redacción del proyecto y ejecución de la obra va a resultar muy ajustado. El contador temporal empezó a correr el 29 de mayo de 2019, fecha de la resolución aprobada por la Dirección General de Turismo,Comercio y Artesanía, en la que se admite la solicitud presentada por el Ayuntamiento talaverano, que se acogía de esta forma a la convocatoria de las llamadas expresiones de interés. 

Con un plazo de ejecución que cumpliría el 29 de noviembre de este año, el Ayuntamiento dispone de menos de once meses para completar el proyecto de adjudicación, definir el anteproyecto y ejecutar la obra. La intervención requerirá además la realización de estudios previos, pero dada la premura de tiempo se ha optado por licitar conjuntamente los servicios de asistencia técnica para adaptar el proyecto genérico con el que el Consistorio se presentó a la convocatoria ITI y la ejecución material de las obras. 

La asistencia técnica incluye los estudios técnicos previos, entre ellos el análisis de las patologías que pueda presentar el monumento, la obtención de licencias, el control arqueológico y la redacción del proyecto de ejecución. En cualquier caso, el punto de partida tendrá que ser el anteproyecto que se redactó en diciembre de 2014 como «Proyecto básico de consolidación de la muralla islámica y recuperación del adarve en el sector El Salvador», sin perder en ningún momento de vista el Plan Especial de la Villa. 

Como fin último, el pliego recoge que la intervención contemplará el uso turístico, con definición funcional de los accesos y la creación de un acceso viable a la torre albarrana y la recuperación de los adarves.