Javier Grijalvo ha estado vinculado directamente al CB Talavera desde 1991 a 2016, de los que los últimos veintidós fueron como presidente de una entidad que cumple treinta años desde su fundación.

El que fuera máximo mandatario recibió el domingo un reconocimiento de su club en el polideportivo Puerta de Cuartos durante el descanso del partido que conllevó el ascenso del equipo a Primera Nacional. Para Grijalvo significó «recordar un poco los viejos tiempos y, además, esos treinta años dicen mucho de la salud del club y la cantera sigue siendo estupenda, mientras que los veteranos continúan aportando mucho». En definitiva, fue una jornada «en la que disfruté mucho ya que hace mucho que no acudía a un partido de baloncesto», ha resaltado a este diario.

Y es que se encuentra desvinculado del deporte de la canasta después de que «he estado durante muchos años entrenando y furgoneta para arriba y abajo con la organización del club».

El CB Talavera Basket ha cumplido su principal objetivo de la temporada que era el ascenso a Primera Nacional. Y el próximo sábado se jugará el título de campeón de Liga de Primera Autonómica frente al Sumando 2 Mora, que también ascendió después de imponerse por 63-69 al Baloncesto Criptana: «Después de lo bien que lo han hecho, tienen que rematar».

Por otro lado, de su época al frente del club recuerda que «empezamos con un equipo de juveniles y otro de cadetes en el año 91». Y, junto a esto, «tuvimos una etapa muy dura en el tema económico e intentamos solventarla lo mejor posible».

Una de las tradiciones del CB Talavera es la foto de todos sus equipos al final de temporada que es un día de fiesta en la entidad. En este sentido, Grijalvo resalta también «los torneos de Navidad de la categoría junior con gente muy importante del baloncesto nacional»; además de que «fuimos campeones regionales en varias categorías».

Y otra época dorada fue la temporada en la que el primer equipo disputó la Copa Presidente cuando estaba al frente de la plantilla Javier de Luis: «La jugamos en 2001 en Quintanar de la Orden y tengo la camiseta que me firmaron los jugadores».

Los años han pasado, pero el CB Talavera continúa fiel a sus principios; así lo asegura Javier Grijalvo: «El club sigue conservando la misma filosofía en su apuesta por la cantera, lo que me llena de orgullo».

Uno de los hitos es la consecución del ascenso a Primera Nacional en una época tan complicada por la pandemia, que «ha dejado una gran huella».