La eliminación prematura del CD Toledo ya ha traído las primeras consecuencias: Manu Calleja no continuará la próxima temporada en el banquillo. El técnico cántabro confesó y explicó su decisión, además de dejar claro que la derrota frente al Socuéllamos no le parecía, para nada un fracaso.
«No lo tenía ni pensado ni meditado, pero hay que ser consciente de la realidad», reconoció. El preparador verde dijo que tiene «mucho sentimiento por el club», por cómo le ha tratado la gente, pero considera que es momento de «asumir la responsabilidad y saber que cuando no consigues el objetivo, tiene que venir gente nueva, con ideas nuevas».
Desde su punto de vista, el verbo fracasar no puede aplicarse a la temporada 2019/20 ni al encuentro disputado el sábado por la noche en el Manuel Delgado Meco de Alcázar de San Juan. «Con todo lo que nos ha pasado, me parece que llegar aquí tiene mucho mérito», aseguró. Es más, añadió que, en caso de haber accedido a la final, también se hubiera marchado.
En este sentido, argumentó que es algo que va con su forma de ser y con su honradez profesional. «No puedo estar en un sitio donde no has hecho el trabajo como debías o donde te ha faltado algo o te has equivocado», comentó. Y es que, todos los problemas surgidos durante el curso «no pueden ser una excusa» para seguir aferrado al cargo: «No se puede alargar algo que no tiene sentido».
Por lo demás, el técnico de Beranga apuntó a que su salida del CD Toledo no tiene nada que ver con el conflicto que pueda existir entre el propietario, Jorge Berlanga, y el presidente, Juan Juárez. Simplemente, piensa que siempre ha querido «lo mejor para el club» y, en este caso, lo mejor es «dar un paso al lado». Aprovechó para agradecer la confianza que le dio en su momento para ponerse al frente del banquillo y repitió que «no puedes estar en un sitio en el que no consigues el ascenso dos años seguidos».
En cuanto al partido en sí, al margen del potencial del Socuéllamos, Calleja reflexionó que «todo lo condiciona el gol en el minuto 6». Desde su prisma, «ponen un pelotazo a la espalda que no debería tener peligro», pero en el que el cuadro verde cometió «un error impropio, ya que César no corta y Olmedo se resbala». El entrenador verde entiende que «nos cambia todo y ahí empezó la precipitación».
Por el contrario, defendió que su plantilla mejoró en la segunda parte, «con esa esencia de tenerla y jugarla». Pero es verdad que lo vio complicado porque el contrario «se metió cerca del área para buscar la velocidad al contragolpe y sabíamos que había que hacer dos; cuando pasa el tiempo, cada vez es más difícil». En conclusión, el cántabro cree que «en estas eliminatorias, el que se pone por delante tiene tendencia a ganar».