Como cada primer martes de mes, el Consejo Local de la Mujer se concentró en el Paseo de la Vega para exigir una lucha contra la violencia de género efectiva. Por ello, y nombrando a las tres mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas -Rosa María Concepción Hernández, Daría Oliva Luna y Sheila Chazarra-, las lectores del manifiesto exigieron a las instituciones «más presupuesto para este lucha, más recursos para los hijos de las maltratadas, y medidas igualitarias».
Por todo ello, y con la intención de sentirse «cerca de esas mujeres que sufren situaciones de violencia a diario», las mujeres de la Asociación Dama centraron su mirada en la necesidad de «ayudar y acompañar» a las mujeres que «desde hace tiempo han enmudecido» porque «el dolor personal, privado, solitario, es más terrorífico que el que cualquiera pueda infligir».
De ahí que quisieran tener una mención especial «de agradecimiento» para las «mujeres supervivientes de la violencia, voluntarias de la fundación Ana Bella, con cuyos testimonios positivos, su empatía, sonoridad y amor» han logrado que, desde 2006, «25.000 víctimas rompan el silencio», se empoderen con un trabajo digno y comiencen una vida feliz.
No en vano, hace un año las mueres del mundo «dijeron basta, basta de desigualdad, basta de desprecio, basta de violencia», y salieron a la calle para luchar por sus derechos», Mujeres artistas, mujeres empresarias, obreras, estudiantes, madres, abuelas, de cualquier color, condición o religión, «una única voz para gritar basta».
Porque la violencia «no es sólo golpear y matar»; hay «violencia cuando se usa la palabra denigrantes, cuando se gesticula para humillar, cuando se obedece por miedo, o cuando se desprecia».
Animaron, las congregadas en el Paseo de la Vega, a «secundar la huelga del 8 de marzo, la laboral, estudiantil, de consumo y de cuidados» que, organizada este viernes por la Plataforma 8MToledo, saldrá de la Vega a las 18,30 horas y llegará a la Plaza del Ayuntamiento.
Finalizaron, las voces de Dama, con los versos de ‘No te rindas’, el poema de Mario Benedetti: «No te rindas, aun estas a tiempo de alcanzar y comenzar de nuevo, aceptar tus sombras, enterrar tus miedos, liberar el lastre, retomar el vuelo (...)».